La estatua de Colón se queda en su plaza en Nueva York

Cristóbal Colón se queda donde está. La estatua del explorador italiano que se alza a los pies de Central Park se vio salpicada por una controversia el pasado verano a raíz de los incidentes raciales en Virginia. Tras examinar durante tres meses los diferentes monumentos dedicados a figuras históricas, la ciudad de Nueva York decide mantenerla como la de Theodore Roosevelt en el museo de Historial Natural o la placa conmemorativa a Henri Philippe Pétain en el bajo Manhattan.

El alcalde Bill de Blasio ha explicado que la decisión sobre cada monumento se realizó con sumo cuidado, tras un periodo de consulta que duró 90 días. El demócrata, que presume cada vez que puede de sus orígenes italianos, era partidario de mantenerla porque consideraba que representa la diversidad de la ciudad. Pero dejó la determinación final a una comisión de expertos que tenía que considerar si Cristóbal Colón era realmente un símbolo de odio.

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La estatua no se retira de Columbus Circle, pero sí se le van a incorporar nuevos elementos informativos que permitan explicar al público que se acerca a la plaza lo que representa para la historia de Estados Unidos. En paralelo, se va a encargar la instalación de un monumento, en otro lugar de la ciudad, dedicado a reconocer a los pueblos indígenas. El alcalde señala que, de esta manera, se mantiene viva una conversación colectiva que es necesaria.

La comisión se creó a finales de agosto a raíz de que muchas ciudades por todo Estados Unidos empezaran a retirar de los lugares públicos memoriales dedicados a las tropas confederadas. El debate político fue intenso. La concejal Melissa Mark-Viverito, que tienes sus raíces en las islas del Caribe, pidió expresamente que el examen incluyera al descubridor de América. La entonces portavoz del consejo municipal dijo que la historia había que mirarla de una forma completa.

Columbus Circle es una de las zonas más transitadas de la ciudad. El monumento está situado frente a la doble torre del conglomerado de medios Time Warner. La comisión estaba integrada por líderes de las distintas comunidades y por expertos. Además de la estatua, la ciudad de Nueva York celebra cada año octubre un desfile por la Quinta Avenida dedicado al descubridor, por su contribución a la cultura de América. El alcalde suele abanderar la marcha.

El alcalde era partidario, sin embargo, de que se retirara de Broadway el nombre del francés Pétain por su colaboración con el régimen Nazi. La Downtown Alliance defendió, por el contrario, que se mantuviera intacta la placa para mostrar el público las contradicciones de la historia. La solución que ofrece la comisión es que en lugar de borrarlo, se cree una aplicación en la que se explique la biografía de cada individuo que aparece en el conocido como paseo de los héroes.

También se pidió la retirada de la estatua dedicada a Marion Sims, unos de los padres de la ginecología moderna, al que se le señaló por haber experimentado con esclavas negras. En este caso se trasladará al cementerio Green-Wood y como en los casos anteriores, se incorporarán nuevos detalles que informen al público sobre su contexto histórico y que reflejen cuestiones relacionadas con su legado.