El cadáver decapitado hallado en el mar es el de la periodista sueca del submarino
Kim Wall fue asesinada, mutilada y tirada al Báltico en Copenhague cuando hacía un reportaje
La periodista sueca Kim Wall fue asesinada, decapitada y desmembrada antes de ser arrojada al mar Báltico. Las pruebas de ADN han confirmado que el torso hallado este lunes por un ciclista en la isla de Amager, a 50 kilómetros al sur de Copenhague, es el de la reportera, de 30 años, que el 10 de agosto se subió a un submarino de fabricación casera del danés Peter Madsen para hacer una historia sobre el caso de este inventor y de su sumergible, el UC3 Nautilus.
Dna match mellem torso og Kim Wall. Ikke yderligere #politidk
— Københavns Politi (@KobenhavnPoliti) August 23, 2017
"El ADN del torso coincide con el de Kim Wall", ha escrito esta mañana en Twitter la policía danesa, sin más comentarios sobre un caso que ha causado conmoción en Escandinavia. Madsen permanece detenido tras haber cambiado su declaración y asegurar que la periodista sufrió un accidente y que arrojó su cuerpo al mar "en un lugar no definido" de la bahía de Køge (sureste de la capital).
Inicialmente el inventor -ahora quería hacer cohetes espaciales- declaró que había desembarcado sana y salva a la reportera en Refshaleoen, una isla de Copenhague. Wall había embarcado el 10 de agosto en el Nautilus para hacer un reportaje del peculiar inventor, su controvertido sumergible (sus constructores y financiadores se habían peleado con Madsen) y de los proyectos de futuro.
Madsen es conocido por sus diseños de submarinos y por ser el cofundador de la firma Copenhagen Suborbitals, creada en 2008 con el objetivo de lanzar al espacio monoplazas tripulados y que ha hecho despegar con éxito cohetes experimentales sin personas a bordo.
El presunto asesino fue rescatado en el mar al día siguiente de la excursión periodística con Wall. Madsen le dijo a los servicios de salvamento que el Nautilus había naufragado durante unas pruebas de lastre.
La investigación ha revelado que el hundimiento del submarino fue provocado, supuestamente, por Madsen, aunque los daños causados han impedido obtener más datos. De la mujer, ni rastro hasta el amanecer del lunes en una playa de Amager, cuando un ciclista encontró un torso sin cabeza, brazos ni piernas.
Jens Møller Jensen, jefe de la policía de Copenhague, ha explicado esta mañana que el torso de reportera había sido lastrado con metal para intentar que se hundiera. Además, el autor del crimen intentó asegurarse de que los gases salieran del cuerpo con el mismo sentido.
De momento se cierra el misterio del paradero de la periodista (que ha trabajado para The Guardian y The New York Times) y la investigación se centra ahora en conocer qué pasó en ese submarino antes del asesinato y qué llevó a Madsen a descuartizar a Kim Wall.
Buzos del ejército danés han inspeccionado las inmediaciones del lugar del hallazgo y otras zonas del área de la capital en busca de más partes del cadáver tras recibir diversas informaciones, aunque sin éxito.
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