El ISIS se atribuye un atentado contra la Embajada de Irak en Kabul

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Un comando con al menos cuatro hombres atacaron este lunes la Embajada de Irak en Kabul, donde un terrorista detonó los explosivos que portaba para abrir el paso hacia el interior a otros tres, que han iniciado un tiroteo con las fuerzas de seguridad. El grupo yihadista autodenominado Estado Islámico (ISIS por sus siglas en inglés) se atribuyó el ataque a través de Amaq, la agencia que utiliza para distribuir sus mensajes y propaganda. El Gobierno afgano ha confirmado la muerte de dos trabajadores afganos y de los cuatro yihadistas que participaron en la acción. 

Además del comando atacante, el asalto causó la muerte de dos trabajadores afganos de la legación diplomática, uno de ellos una mujer, y heridas leves a tres miembros de las fuerzas de seguridad, explicó a Efe el portavoz de la Policía local, Basir Mujahid. Es la primera vez que la Embajada de Irak en Kabul es blanco de un ataque, después de varios atentados contra misiones occidentales, entre ellas, la española, atacada en diciembre de 2015 por los talibanes. La legación iraquí está situada cerca de varios edificios de los servicios de la policía, entre ellos la sede del Afghan Public Protection Police Forces (APPF), un servicio del Ministerio del Interior creado para proteger los edificios no oficiales. 

El ataque comenzó hacia las 11.10 hora local (6.40 GMT) en el área de Shar-e-Naw, en el centro de la capital afgana, hasta donde se trasladaron las fuerzas de seguridad. Casi dos horas después de la primera deflagración, todavía podían oírse varias explosiones de gran potencia y disparos, según los vecinos. Una espesa humareda negra se elevaba por encima del barrio atacado y las sirenas de policía y ambulancias resonaban más de una hora después del inicio del ataque, según fotógrafos de AFP. "Ambulancias y fuerzas de seguridad, incluidas estadounidenses, fueron desplegadas en la zona", afirmó uno de ellos. Mantenidos a distancia de la entrada del recinto, sin embargo, no pudieron ver heridos ni otras víctimas.

La Embajada iraquí, que raramente realiza actos públicos, convocó el pasado 13 de julio una rueda de prensa para celebrar con los medios de comunicación en la capital afgana "la victoria lograda contra Daesh [acrónimo del ISIS en árabe] en la ciudad de Mosul".

El ISIS, que pierde terreno en Siria e Irak, está presente en Afganistán desde principios de 2015, principalmente en el este y ahora en el norte del país. El grupo reivindicó varios atentados mortales en el centro de Kabul desde hace un año, el primero de ellos el 23 de julio de 2016, que dejó 84 muertos y 300 heridos entre la minoría chiÍ afgana.

Washington se ha marcado como objetivo derrotar por completo a los yihadistas en Afganistán antes de que acabe el año y en este contexto lanzó el pasado abril contra una de sus guaridas la mayor bomba de su arsenal convencional, conocida como "la madre de todas las bombas".

La misión de la ONU en Afganistán anunció este mes que el conflicto afgano marcó un nuevo récord de muertes de civiles, con 1.662 fallecidos en los primeros seis meses del año, un 2% más que en 2016, incluido un aumento de decesos de niños y de mujeres del 9% y 23%, respectivamente. Desde que empezó a contabilizar las víctimas civiles del conflicto afgano en enero de 2009, la ONU ha informado de la muerte de 26.500 civiles y de 49.000 heridos.