El juez argentino Carlos Fayt renuncia y dejará la Corte Suprema

En su enfrentamiento con la Corte Suprema de Argentina, el kirchnerismo había puesto en duda este año la salud mental de uno de los magistrados del tribunal, Carlos Fayt, de 97 años. Fayt se había negado a renunciar por cuestiones de edad mientras diputados kirchneristas pedían que se lo sometiera a un examen para analizar su presunta senilidad. Pues este martes la Corte Suprema anunció que Fayt finalmente renunciará a su cargo, pero el 11 de diciembre, justo un día después de que la peronista Cristina Fernández de Kirchner entregue el poder a quien sea elegido en los comicios presidenciales del próximo 25 de octubre.

La pelea entre el Gobierno de Fernández y el máximo tribunal recrudeció en 2013 cuando los magistrados echaron por tierra una reforma judicial que impulsaba la jefa de Estado. A finales de 2014, uno de los jueces, Raúl Zaffaroni, amigo del kirchnerismo, renunció porque iba a cumplir 75 años. Entonces los dirigentes oficialistas comenzaron a reclamar la dimisión del nonagenario Fayt.

"La última embestida del Gobierno fue fuerte y no queríamos que (Fayt) siga pasando por esta circunstancia como la de los últimos meses, o de los últimos dos años”, explicó la futura renuncia el abogado del veterano magistrado, Jorge Rizzo. “No puede seguir sometido a su edad a este tipo de vaivenes. Seguramente no les gustaban (al Gobierno) los fallos de Fayt”, completó Rizzo.

Fayt, de origen socialista, lleva 32 años en el máximo tribunal de Argentina. Su renuncia deja la corte con solo tres miembros. Deberán elegirse dos nuevos. En la actualidad, el clima político crispado impide que el kirchnerismo pacte con la oposición dos candidatos que logren los dos tercios de los votos del Senado necesarios para su nombramiento. Seguramente será tarea del sucesor de Fernández, ya sea el peronista Daniel Scioli o el opositor Mauricio Macri, la búsqueda del consenso requerido para que la Corte Suprema funcione con normalidad.