Varias ONG piden protección para el testigo contra el alcalde de Iguala
El hombre que se atrevió a acusar a Abarca de asesinar en persona a un activista vive en peligro, afirman las organizaciones
Nicolás Mendoza Villa, el hombre que se atrevió a acusar al alcalde Iguala cuando aún gobernaba, vive bajo constante hostigamiento y requiere de protección inmediata. Así lo consideran organizaciones internacionales, como la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, en sus siglas en inglés), que han solicitado por escrito al procurador general de México, Jesús Murillo Karam, que garantice su seguridad. En la misiva, la ONG recuerda que Mendoza Villa fue testigo de la tortura y asesinato del ingeniero Arturo Hernández Cardona, líder de Unidad Popular, y de otros dos miembros de dicha organización. Todos ellos, incluido el testigo, habían sido secuestrados, según la versión que ahora avala la fiscalía, por sicarios bajo las órdenes del alcalde de Iguala, José Luis Abarca.
"La desaparición forzada, tortura y muertes vinieron tras meses de incidentes de amenazas y acoso contra integrantes de Unidad Popular por parte de las autoridades locales en Iguala, incluyendo al entonces regidor, en represalia por las actividades y protestas pacíficas de esta organización", señala WOLA. El grado de enfrentamiento y terror llegó a tal punto que el 29 de mayo de 2013, 11 activistas de Unidad Popular presentaron una denuncia ante el ministerio público contra Abarca, su esposa y el jefe de la Policía Municipal, en la que señalaban su "temor fundado" de que el alcalde "pudiese ordenar privarles de la vida". Un día después, se registró el secuestro del ingeniero y sus compañeros.
Mendoza Villa se encontraba entre los capturados, pero pudo escapar cuando iba a ser ejecutado. El 25 de julio de 2013 prestó testimonio y declaró que durante el secuestro, el propio Abarca había matado al ingeniero Hernández Cardona de un tiro en la cabeza y otro en el pecho. Desde entonces, el testigo ha sido perseguido. "El 4 de agosto pasado, hombres armados entraron en su domicilio y desde entonces hay gente vigilando su residencia permanentemente", afirma la ONG. Debido a esta situación de acoso, las organizaciones internacionales solicitan a la Procuraduría General que "proteja y garantice la seguridad de Mendoza Villa y su familia".
El testimonio de este superviviente es una de las claves en el caso contra Abarca y su esposa, capturados el 4 de noviembre en un escondite de la Ciudad de México. Su relato pesa en las diligencias de la fiscalía y ha servido para la orden de detención y posterior encarcelamiento. Mendoza Villa, casado y con cuatro hijos, vive en constante huida desde que prestó declaración.
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