EE UU crea una red de seguridad para proteger a las empresas de ciberataques

La Casa Blanca ha presentado este miércoles la Red de Ciberseguridad, un proyecto cuyo objetivo es ayudar a las empresas estadounidenses a reducir los riesgos de ataques informáticos y mejorar la protección de sus infraestructuras. La iniciativa se enmarca dentro de la orden ejecutiva que el presidente Barack Obama firmó hace un año para responder a la amenaza cibernética.

"Este programa esta dedicado a ayudar a las compañías, a todas ellas, no importa su grado de sofisticación o su tamaño y está diseñado desde la perspectiva de las empresas no desde la del Gobierno", ha señalado la secretaria de Comercio, Penny Pritzker durante la presentación de la red de ciberseguirdad, un proyecto en el que además de su departamento está involucrado el de Seguridad Nacional.

El proyecto que ha presentado la Casa Blanca pretende ofrecer a las empresas una infraestructura común para que puedan hacer frente a sus problemas de seguridad

La protección frente a los ataques informáticos se convirtió en una de las prioridades de la Administración Obama durante su segundo mandato que, como muchas otras, fue eclipsada por el escándalo del espionaje de la NSA. Las incursiones de piratas informáticos en 2013 costaron a las empresas estadounidenses pérdidas económicas de entre 24.000 y 120.000 millones de dólares, de acuerdo con un informe del Centro de Estrategia y Estudios Internacionales (CSIC). El antiguo secretario de Defensa, Leon Panetta, aseguró que las intromisiones de hackers en las agencias del Gobierno constituían una de las principales amenazas para la seguridad del país, refiriéndose a ellas como "el próximo Pear Harbour". A lo largo del año pasado, la Administración reconoció que muchas instalaciones federales de Washington habían sido penetradas por piratas informáticos y apuntó directamente al Ejército chino como responsable de las mismas. Varios medios de comunicación y multinacionales también responsabilizaron a China del hackeo de sus oficinas. 

El proyecto que ha presentado la Casa Blanca pretende ofrecer a las empresas una infraestructura común para que puedan hacer frente a sus problemas de seguridad, proporcionándoles asesoramiento y herramientas para identificar sus carencias en materia de protección, prevenir ataques, detectarlos, ofrecer respuestas y recuperarse de potenciales incursiones de hackers. El programa quiere promover la interconexión del sector privado y las agencias federales y tender puentes entre los consejeros delegados y presidentes de las compañías y el Gobierno para favorecer un diálogo que potencie la actividad empresarial y la seguridad informática.

Las incursiones de piratas informáticos en 2013 costaron a las empresas estadounidenses pérdidas económicas de entre 24.000 y 120.000 millones de dólares

Entre las iniciativas que contempla la Red se encuentra el programa C3, al que pueden inscribirse voluntariamente aquellas compañías que no tienen ninguna experiencia en materia de ciberseguridad para poder recibir asesoramiento directo por parte de expertos del Gobierno.

El Gobierno no ha hecho previsiones sobre cuántas empresas prevé que se sumen a la red, pero la forma de inscribirse, de acuerdo con la información que han ofrecido los responsables del proyecto, es tan sencilla como visitar la página web de la Red de Ciberseguridad. La iniciativa irá evolucionando y acomodándose en función de las carencias y necesidades que se observen y demanden las empresas participantes, han reconocido.

El hecho de incorporarse a la red implica que las empresas deban compartir con el Gobierno federal información sobre sus sistemas de seguridad, una circunstancia que ha levantado suspicacias en torno a las garantías de que se respete la privacidad de sus datos. Aunque no han sido muy específicos al respecto, los funcionarios de la Administración que han informado sobre el proyecto, han asegurado que se han integrado mecanismos para proteger la reserva alrededor de la información cedida por las compañías.