El fiscal general pide prisión inmediata para 23 condenados del ‘mensalão’

El nuevo Fiscal General de la República, Rodrigo Janot, recién designado para el cargo por la presidenta Dilma Rousseff, ha sorprendido al Tribunal Supremo al pedir la prisión inmediata a los condenados por el caso mensalão, una de las mayores tramas de corrupción de la historia democrática de Brasil.

"Es entendimiento sedimentado en el ámbito de ese Supremo Tribunal Federal que no es necesario esperar el juicio de todos los recursos para la determinación del inmediato cumplimiento de las penas", escribe Janot en un documento de tres páginas, y añade: "Las consecuencias lógica y jurídica de la sentencia condenatoria inmutable es que la ejecución deba ser inmutable".

Este miércoles el Supremo ha retomado las sesiones del mensalão con el análisis de los recursos de algunos de los reos. Después de ello, los magistrados han examinado las reclamaciones de aquellos condenados que obtuvieron cuatro votos de magistrados contra dicha pena. Ese es el número mínimo que permite cuestionar la decisión, ya que se trata de un veredicto que no fue apoyado por la mayoría absoluta de los 11 jueces que están en la Corte. En el caso, por ejemplo, de José Dirceu, el reo político más importante de todo el proceso, el nuevo análisis puede suponer meses de discusión.

El debate era si los mandatos de prisión deben realizarse ya o si es necesario esperar a analizar todos estos recursos. La Corte estaba dividida, y la noche del martes Janot sorprendió con la petición de que 23 de los reos (entre ellos, Dirceu) ingresen ya en la cárcel. La tesis del fiscal es que, en el mejor de los casos, la mayoría seguirían condenados a prisión aunque fueran aceptadas sus reclamaciones. Los que ya hayan consumado todos los recursos -algo que podría acontecer el mismo miércoles- ya no tendrían ningún motivo para no ingresar en prisión.

La duda es en cuanto a otros, como Dirceu o João Paulo Cunha, expresidente del Congreso, ambos del Partido de los Trabajadores (PT): en caso de que se les disminuya la pena podrían realizar la condena en régimen semiabierto, durmiendo en la cárcel y trabajando durante el día en alguna colonia agrícola, por ejemplo.

La decisión está ahora en las manos de los miembros del Supremo, que deberán dar en las próximas 24 horas una respuesta a la petición del fiscal general. Dicho voto, y toda la discusión que llevará consigo, podrá ser seguida en directo por la televisión, como ya es normal en las sesiones del Supremo Tribunal Federal.

Tanto la Corte como el mundo político han sido tomados de sorpresa con la petición de Janot. El partido más afectado es el PT, cuyos condenados fueron figuras de primera plana en el primer Gobierno del expresidente Lula da Silva. El año próximo hay elecciones nacionales y la campaña está ya en la calle, así que los analistas políticos creen que quizás sería mejor para el PT que los condenados entraran enseguida en la cárcel. Así, el ruido informativo podría apagarse antes de que los brasileños acudan a las urnas.