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Las presiones de Israel y la guerra en Siria perjudicaron a Hezbolá ante Europa

Hezbolá ha sido responsabilizada por un atentado en Bulgaria y otro, frustrado, en Chipre La milicia ha tomado una parte activa en la guerra civil siria, apoyando a El Asad

Benjamín Netanyahu durante un consejo de ministros, el 14 de julio.
Benjamín Netanyahu durante un consejo de ministros, el 14 de julio.POOL (REUTERS)

La milicia del grupo chií libanés Hezbolá ha acabado en la lista oficial de grupos terroristas de la Unión Europea por dos motivos principales. Por un lado, a causa de una intensa y prolongada campaña diplomática de Israel, cuyos líderes han exigido en numerosas instancias a Bruselas que diera este paso, sobre todo, después de dos atentados planificados por operativos de Hezbolá en suelo europeo el año pasado, uno frustrado, en Chipre, y el otro con seis víctimas, cinco de ellas israelíes, en Bulgaria. Por otro, a Hezbolá le han perjudicado sus propias acciones, con su injerencia y parte activa en la guerra civil en Siria, en apoyo del régimen de Bachar el Asad.

Según concluyeron las autoridades búlgaras en febrero, un ataque con explosivos contra un autobús con turistas israelíes en la localidad de Burgas, el 18 de julio de 2012, fue ejecutado por tres operativos de Hezbolá.

“Es la decisión adecuada. Lo que vivimos fue un atentado terrorista y como tal debía considerar Europa a los que integran Hezbolá”, dijo este lunes Vered Kuza, israelí de 55 años, que viajaba en aquel autobús y resultó herida. En marzo, además, un juzgado de Chipre condenó a cuatro años de prisión a Hossam Taleb Yaacoub, afiliado al grupo libanés, por haber intentado un atentado similar, contra israelíes, antes de ser arrestado el 7 de julio de 2012.

“En años recientes, Israel ha dedicado grandes esfuerzos en explicarle a los países miembros de la UE que Hezbolá es el brazo terrorista del régimen iraní y perpetra ataques en todo el mundo”, dijo este lunes Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel, en el Parlamento. Además, dijo que, en su opinión, no hay distinciones entre las ramas militar y política de ese grupo libanés. “Para el Gobierno de Israel, Hezbolá es una sola organización, cuyos brazos no se diferencian”, añadió.

Netanyahu había pedido en repetidas instancias a numerosos líderes europeos que aceptaran dar este paso. El 20 de junio, en una reunión en Jerusalén con Catherine Ashton, jefa de la diplomacia europea, le dijo: “Si Hezbolá no es una organización terrorista, entonces no sé qué puede serlo”. El presidente israelí, Simón Peres, llegó a pedir esta inclusión en la lista de grupos terroristas en un viaje oficial a Bruselas en marzo. Hamás, el grupo islamista que controla la franja de Gaza fue incluido en ese inventario en 2003.

No fue solo Israel quien presionó a la UE para que incluyera a Hezbolá en esa lista oficial, como Estados Unidos hizo en 1997. En cierto modo, la propia milicia se ha colocado en la situación en la que ahora se ve, con la congelación de sus activos en suelo comunitario, al luchar abiertamente en Siria junto a las tropas de El Asad, en un conflicto en el que ya han fallecido más de 100.000 personas, muchas civiles. Hezbolá tomó parte en el exitoso asedio del régimen a Qusair, en el que perdió a un centenar de sus operativos. En mayo, el líder del grupo chií, Hasán Nasralá, admitió en un discurso que, en Siria, Hezbolá luchaba por su supervivencia. Aquello provocó enfrentamientos entre suníes y chiíes en Líbano.

Hezbolá, que tradicionalmente ha obtenido apoyo armamentístico de Irán, forma parte de un eje político que une Teherán con su feudo chií en Beirut, a través del Gobierno en pie en Damasco. Con El Asad en el poder, la milicia ha recibido envíos de armamento a través de Siria. En lo que va de año, de hecho, Israel ha atacado tres objetivos militares en las inmediaciones de la capital siria para destruir lo que la diplomacia norteamericana considera que eran remesas de misiles y otro armamento sofisticado de Irán a Hezbolá.

“La decisión de la UE no va a cambiar la situación en Líbano en el corto plazo”, opinaba este lunes el analista Yoram Schweitzer, exjefe de la sección de antiterrorismo internacional de las Fuerzas de Defensa de Israel. “Pero Hezbolá ha sufrido grandes reveses en el año y medio pasado, sobre todo con su intervención en Siria, que ha abierto un frente en Líbano. Es posible que estas sanciones económicas en Europa tengan sus efectos y agraven los problemas que asfixian a Hezbolá a medio o largo plazo”.

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