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Obama: “Boston volverá a correr”

El presidente acude al homenaje a las víctimas del atentado en el maratón

Yolanda Monge

Compasivo con las víctimas y retador con los culpables de haber traído el terror a Boston, el presidente de Estados Unidos ha asegurado este jueves, durante su alocución en el servicio interreligioso ofrecido en la Catedral de la Sagrada Cruz, que la ciudad celebrará el año que viene, el tercer lunes del mes de abril como marca el calendario, su maratón. “Volverán a correr”, ha afirmado Barack Obama a los bostonianos. “No me cabe duda, Boston celebrará su 118 maratón”.

Fue entonces cuando los asistentes al acto se pusieron en pie y abrazaron a su mandatario con un inmenso aplauso. A la emoción contenida le sucedían las lágrimas. Dos mujeres vistiendo la chaqueta oficial del maratón –amarilla y azul- se consolaban en su dolor. Mientras se sucedían las palabras –hermosas- y la garantía de que los valores que definen al pueblo estadounidense no se verán alterados por las bombas, los investigadores avanzaban en una búsqueda frenética de pruebas que den con el culpable -o culpables- del crimen que el pasado lunes dejaba tres muertos —entre ellos un niño de ocho años— y más de 170 heridos en la línea de meta del famoso maratón de Boston.

Agentes del FBI se centraban este jueves en dos hombres vistos en uno de los miles de vídeos que la agencia federal ha recibido para ayudar en sus pesquisas

Agentes del FBI se centraban este jueves en dos hombres vistos en uno de los miles de vídeos que la agencia federal ha recibido para ayudar en sus pesquisas. Según informó en una audiencia del Congreso en Washington la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, el FBI quería localizar a esas personas para entrevistarlas, pero no las definió como sospechosas.

“Hay algunas imágenes que han generado dudas sobre aquellos a quienes el FBI quiere interrogar. No diría que son sospechosos en el sentido técnico de la palabra, pero necesitamos la ayuda del público para identificar a estos individuos”, ha remarcado Napolitano aportando más confusión a la ya existente sobre los posibles sospechosos identificados.

El tabloide The New York Post filtró una serie de fotografías, ante lo que las autoridades se apresuraron a declarar que “El FBI no ha aportado al público ninguna foto de sospechosos”. “Cualquier imagen que sea revelada por canales no oficiales no debe de ser considerada creíble”, puntualizó la agencia federal en un comunicado.

¿Un crimen resuelto en Internet?

Para cuando finalmente las fuerzas del orden revelen la identidad del sospecho o sospechosos del atentado de Boston habrán sido ya algunos los individuos que habrán sido juzgados antes por la opinión pública como resultado de una angustiosa necesidad de información acrecentada por los resultados que arroja Internet.

Casi como si de una investigación paralela se tratase, los ciudadanos no solo han enviado sus fotos y grabaciones al FBI —que las solicitó encarecidamente— sino que páginas web como Reddit.com; 4chan.org; o Imgur.com han pedido a quienes puedan aportar luz que suban sus materiales a sus webs. En el caso de Reddit, se creó un capítulo titulado “Encontrar a los culpables del ataque” que ha logrado más de 1.700 miembros que han aportado sus fotos en tres días.

Con este método de colaboración ciudadana se descubrió, en parte, la identidad de los responsables de los atentados de Londres en julio de 2005. Puede que también sea la llave para este caso. Pero mientras tanto se ha visto a un hombre con la ropa —de color negro— desgarrada por la explosión huir del lugar del ataque —el miedo produce resultados impredecibles— y ser considerado sospechoso por correr y no ayudar. Otra instantánea que ha circulado por la red es la que muestra a un joven con una mochila negra en brazos y como apoyo de esa foto —enfatizando y declarando culpabilidad— otra imagen de una mochila negra reventada por una explosión. En este caso, dos más dos no siempre son cuatro.

Fuentes cercanas a la investigación aseguran que dentro de la Administración existe un intenso debate sobre si esas imágenes debían ser oficialmente difundidas y si debía pedirse ayuda a la población para identificar a las personas en ellas.

En este punto de la indagación, las autoridades mantienen gran prudencia, para evitar que sucedan fiascos como el ocurrido en 1996 durante los juegos olímpicos de Atlanta, cuando se detuvo a un guarda de seguridad como responsable del ataque con bomba del que resultó ser inocente

Barack Omaba ha llevado este jueves al terreno personal lo que sucedido en Boston. “Boston es mi hogar también”, ha informado a los presentes el mandatario, entre quienes se encontraba su rival político en la pasada carrera electoral, el exgobernador de Massachssetts Mitt Romney —ya casi historia antigua—.

Obama ha recordado que en esta ciudad pasó sus importantes años como estudiante de derecho en Harvard —“como lo hizo Michelle”—; y en esta ciudad la convención demócrata de 2004 le lanzó a la estratosfera de las estrellas políticas, “cuando muy pocos sabían pronunciar bien mi nombre”, ha bromeado el que era en aquella época senador por Illinois.

Por un rato, el presidente ha dejado de lado la dulzura con la que habló de las víctimas para asegurar en tono retador que quien hubiera cometido el atroz crimen había elegido “la ciudad equivocada”. “Estoy aquí para reafirmar que el espíritu de esta ciudad está impertérrito y el espíritu de este país permanecerá intacto”, garantizó Obama.

“Acabaremos la carrera, porque así somos y porque en la milla más dura, cuando creemos que hemos topado con un muro, sabemos que hay alguien que nos ayudará a levantarnos y nos recogerá”, ha señalado el presidente. “Nos habéis enseñado”, ha advertido Obama a quienes espera que en breve enfrenten la justicia norteamericana, “que ante la maldad y el terror, nosotros elegimos la compasión, la amistad y el amor”.

Con su poderosa oratoria, Obama ha comenzado diciendo: “Era un bonito día en Boston…Y en un instante, la celebración se transformó en tragedia”. El presidente ha abandonado por un momento la prosa y ha recordado al poeta cuando aseguraba que “Boston no es una ciudad, es un estado de gracia”.

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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