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“Se ha muerto, se ha muerto”

Los familiares de los heridos en la explosión aguardan con angustia noticias en los hospitales

Raquel Seco
Traslado de uno de los heridos en la explosión.
Traslado de uno de los heridos en la explosión.EFE

“Se ha muerto, se ha muerto”; repite una mujer que ronda la cincuentena. Pasa con rostro desencajado entre las cámaras de televisión y los demás familiares de víctimas de la explosión en el complejo central de Pemex en Ciudad de México. Una de las 14 personas trasladadas inicialmente la tarde de este jueves al hospital de la Cruz Roja de la colonia Polanco ha fallecido y conocidos y parientes de las otras 13 aguardan noticias en la sala de espera de urgencias de este centro. Dos de los ingresados están graves.

La sala está repleta. Mucha gente, colgada del teléfono. Suenan los celulares, se oyen lamentos. También hay muchos periodistas, pero casi nadie tiene humor para hablar.

“Familia de Tomás Rivera”. Cinco mujeres se abalanzan sobre el mostrador de urgencias y entrelazan los brazos. “Estable”, anuncia la joven de recepción. Tendrán que esperar para llevárselo al hospital de Pemex en Azcapotzalco (en el que se encuentra la mayoría de los heridos).

Pero la madre y las tías de Tomás, que trabajaba en la planta baja de la torre, se encuentran más tranquilas. Nayely Carreño, su mujer, cuenta con los ojos brillantes que tardó más de dos horas en dar con su marido. “Una amiga me avisó por la tarde y no sabía cómo encontrarlo. En carro, imagínate con este tráfico”, dice mientras espera poder visitarlo.

Joel Benítez, mensajero en Pemex, comprobaba la tarjeta de salida del edificio cuando se produjo la explosión. Consiguió llamar por teléfono a su hermano a las 15.57, apenas unos minutos después, para decirle que se encontraba bien. Otros no pudieron hallar a sus parientes con tanta rapidez. Muchos de los familiares de los afectados están recurriendo a Locatel, un servicio de call center, para encontrarlos.

Siete horas después de la explosión sigue la angustia en la Cruz Roja de Polanco. Muchos aún no han podido ver a sus parientes.

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Sobre la firma

Raquel Seco
Periodista en EL PAÍS desde 2011, trabaja en la sección sobre derechos humanos y desarrollo sostenible Planeta Futuro. Antes editó en el suplemento IDEAS, coordinó el equipo de redes sociales del diario y la redacción 'online' de Brasil y trabajó en la redacción de México.

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