Nueva York tendrá en su metro anuncios contra la Yihad islámica

La coincidencia en el tiempo no podía ser más inoportuna, cuando violentas protestas en Oriente Próximo debido a un vídeo que ridiculiza al profeta Mahoma ha encendido la ira de grupos extremistas islámicos que hasta el momento ha costado la vida a 30 personas, entre ellas el embajador norteamericano en Bengasi (Libia). Un juez ha dado su autorización para que diez anuncios que equiparan a los musulmanes radicales con salvajes sean colocados en diez paradas del metro de Nuevo York a partir del lunes.

Detrás de la iniciativa para criticar a los islamistas violentos está Pamela Geller, blogera conservadora que en su momento se opuso a que se construyera un centro islámico en las cercanías de la Zona Cero de Nueva York. Geller es además directora de la Iniciativa para la Defensa de la Libertad Americana y ha calificado la sentencia del juez que autoriza la colocación de los anuncios como “una victoria para la Primera Enmienda” de la Constitución americana, esa que garantiza la libertad de expresión y permite, por ejemplo, que la quema de la bandera no sea un delito.

El anuncio dice así: “En cualquier guerra entre el hombre civilizado y el salvaje, apoye al hombre civilizado. Apoye Israel. Derrote la Yihad”. Para Geller, cualquier guerra contra civiles es un ataque perpetrado por “salvajes”. “Los cohetes de Gaza que se lanzan contra Israel es un acto de salvajes; volar por los aires autobuses es de salvajes; planificar un ataque contra un autobús lleno de madres y niños judíos es de salvajes; Daniel Pearl; el 11-S; el 7 de julio; el 11-M son todos actos de salvajes”, declaró Geller en referencia a los atentados de Al Qaeada en EEUU, Londres y Madrid. “Y solo estoy señalando lo obvio”, puntualizó la activista.

Semanas atrás –entre el 13 de agosto y el 4 de septiembre-, los anuncios fueron colocados en autobuses de la ciudad de San Francisco, lo que llevó a grupos de artistas a deformar con pintadas el texto o arrancar  la palabra Yihad (Guerra Santa). Geller explicó que el jueves interpuso otra demanda en Washington para colocar los anuncios en el trasporte público de la capital de la nación después de que las autoridades se negaran a ponerlos debido a la ola de violencia desatada en Oriente Próximo.

En Nueva York, la Autoridad de Transporte Metropolitano (MTA, siglas en inglés) ha informado de que los anuncios serán instalados tras la decisión del juez pese a que inicialmente se negó apoyándose en su política de no publicar mensajes que ofendan a individuos o grupos basándose en su raza, color, religión, origen u otras características.

La eterna batalla entre el derecho a la libertad de expresión y actitudes insultantes o pocos respetuosas ha vuelto a concretarse una vez más en este caso. La Liga Anti Difamación, un grupo dedicado a detectar actitudes antisemitas y discriminatorias en EEUU, ha manifestado su apoyo a la libertad de expresión de los ciudadanos aunque ha reprobado el mensaje que aporta los anuncios.

La directora de la sección de Nueva York de la ACLU (Unión Americana por las Libertades Civiles, siglas en inglés), Donna Lieberman, respaldó la colocación de los anuncios a pesar de considerarlos “ofensivos”. “Más ofensivo hubiera sido censurarlos porque eso hubiera violado el derecho a la libertad de expresión de todas las ideas a pesar de que algunas de estas sean de pésimo gusto”, dijo Lieberman a Associated Press.

Geller ha informado que el coste de poner durante un mes los anuncios en el metro neoyorquino es de 6.000 dólares.

Geller, con su grupo Parar la Islamización de América, ayudó a espolear hace dos años la polémica surgida tras el intento de construir un centro islámico a escasa calles del lugar donde estaban erigidas las Torres Gemelas derribadas durante los ataques terroristas del 11-S.