_
_
_
_
TORMENTAS PERFECTAS
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Voces y cuerpos de la historia

La historia nos habla, con voz potente, a través de una partícula invisible, una sólida conjetura científica que hace saltar las lágrimas de los físicos

Lluís Bassets
MATT

La historia ha entrado últimamente en una época muy mala. Nunca ha sabido adónde iba, pero ahora ni siquiera está segura de su propia existencia. Su corporeidad, tan efectiva cuando era solo una rolliza musa del Parnaso, la memoriosa Clío, se desvanece en la época de instantaneidad digital. Es el momento glorioso en que ella lo es todo y, en consecuencia, se acerca a la nada. Un partido de fútbol o de tenis, un gol a lo Panenka, una noche de negociación sobre la salvación de bancos quebrados, un auto judicial sobre delitos comunes cometidos por ciudadanos nada comunes, hacen historia; mientras matanzas, invasiones y atrocidades de todo tipo se hunden en los bajos llenos de neblina de las páginas digitales y en las columnas de breves de los diarios en papel.

Francis Fukuyama la había dado por liquidada hace ya algunos años, en la época del mundo unipolar y antes de que todo esto se pusiera de nuevo patas arriba. La había revitalizado, en cambio, la teoría del relato, que pone la realidad en manos de los guionistas, y los guionistas, a sueldo de las multinacionales, partidos y Gobiernos. Así es como la musa de antaño se hace carne gracias a trucos de serie de televisión, la estructura de un discurso político o una campaña de publicidad viral. Todo se le permite a quien haga política salvo perder el hilo del relato, quedarse sin historia que contar.

La historia ha tomado esta semana dimensiones colosales. Ocupada diariamente en la crepitación del instante, el tuiteo de un famoso, la consistencia narrativa de un político o una supermarca deportiva, de pronto se adentra en las oscuras explicaciones de los orígenes del universo. La prensa con reputación ha sacado sus titulares mayores para anunciar el descubrimiento de una partícula subatómica que encierra la cohesión de la materia y la clave de los orígenes. Una maravillosa jerga digna de la mejor imaginación literaria o teológica adorna estas primeras páginas como si fuera una broma contra el periodismo y su oportunista trivialización de la historia: hadrones, bosón, partícula de Higgs, acelerador de partículas.

Sobre las explicaciones, mejor no entrar en detalles. Basta con atender a los futuros descubrimientos que se seguirán del feliz hallazgo. Sandro Bertolucci, el director del CERN (Laboratorio Europeo de Física de Partículas), nos lo cuenta con palabras calcadas a las que usaba Donald Rumsfeld, secretario de Estado de Defensa de Estados Unidos cuando Bush, para hablar de las armas de destrucción masiva: hay hechos desconocidos cuya existencia conocemos y hechos desconocidos que no sabemos que no conocemos. Estos últimos, a la vista del bosón, son el 96% del universo. No es Bankia, pero es noticia. Primera página. Abriendo. La historia nos habla, con voz potente, a través de una partícula invisible, una sólida conjetura científica que hace saltar las lágrimas de los físicos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_