Myanmar vota en el regreso político de la premio Nobel opositora Suu Kyi
La líder de la oposición civil al poder del Ejército, vencedora de las elecciones de 1990 -tumbadas por los militares- y reprimida por dos décadas, opta a un escaño
Los colegios electorales en Myanmar (antigua Birmania) han abierto sus puertas este domingo para unos comicios legislativos parciales: se votan 37 escaños del Parlamento y seis del Senado, un 7% del total de los dos órganos legislativos. Se trata de un episodio electoral relevante en el proceso de reconciliación nacional tras décadas de enfrentamiento entre los militares y el movimiento democrático de este país del sudeste asiático.
El icono del movimiento civil de Myanmar, la opositora Suu Kyi, premio Nobel de la Paz, se presenta a los comicios y es probable que logre un puesto parlamentario. Suu Kyi ganó las elecciones birmanas de 1990, que fueron anuladas por una Junta Militar.
Ella fue arrestada y estuvo presa en arresto domiciliario la mayor parte de los años noventa y de la primera década de los 2000. La liberaron en noviembre de 2010, coincidiendo con las elecciones que pusieron fin al mandato de la junta de los generales. Dicha votación, sin embargo, fue amañada para formar un Gobierno teóricamente civil pero plegado en la práctica a la voluntad del Ejército.
Las elecciones arrancan precisamente con la sombra de duda arrojada este sábado por la propia Suu Kyi. La líder opositora dijo en una rueda de prensa que las votaciones no serán libres ni justas por las irregularidades que supuestamente se han cometido en campaña.
Suu Kyi, de 66 años, ha acusado a sus rivales de estropear carteles electorales, manipular las listas de votantes y lanzar objetos contra algunos candidatos. Su partido, la Liga Nacional para la Democracia, incluso ha afirmado que miembros de la Comisión Electoral han hecho campaña por el partido gobernante.
En estos comicios votarán cerca de seis de los 54 millones de ciudadanos birmanos, una población joven, con una media de edad de 27 años, y en la que un 90% de la población profesa la religión budista.
La pugna por los escaños del Parlamento y Senado es un duelo entre la Liga Nacional por la Democracia, Suu Kyi, y el Partido del Desarrollo y Solidaridad de la Unión, afín a los exgenerales de la junta militar que mantuvieron bajo arresto domiciliario a la Nobel de Paz.
El partido de Suu Kyi y el capitaneado por el presidente birmano y exprimer ministro en la última etapa de régimen militar, Thein Sin, son los únicos que presentan candidatos en la totalidad de las circunscripciones electorales, muy diseminadas por el territorio y la mayoría en zonas rurales.
La votación tiene lugar después de que el jefe de las Fuerzas Armadas, el general Min Aung Hlaing, rechazara esta semana cualquier intento de reforma de la Constitución que pueda reducir el poder político de los militares, en respuesta a Suu Kyi, quien durante su campaña ha abogado por eliminar la cuota de escaños reservados a los uniformados.
La Constitución de 2008, aprobada durante el régimen militar, reserva para los jefes y oficiales de las Fuerzas Armadas 110 escaños del total de 440 que componen el Parlamento y 56 de los 224 que constituyen el Senado.
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