Estados Unidos propone el regreso de Honduras a los foros regionales

Estados Unidos considera que es hora de sacar a Honduras del ostracismo regional. Así lo expresó ayer la secretaria de Estado, Hillary Clinton, durante su alocución en la 40ª Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebra en la capital peruana, Lima, desde el domingo, con la presencia de altos representantes de 33 países, y en la que se tiene previsto aprobar al menos 80 resoluciones de diverso tipo, la mayoría discutidas previamente.

La cumbre continental lleva como título Paz, seguridad y cooperación en las Américas, que refleja la intención del país anfitrión de que se discuta en ella la propuesta del presidente, Alan García, de lograr un acuerdo para fijar límites a las compras de armamento en la región, que se estima que ascenderán a más de 35.000 millones de dólares en los próximos años. Aun a sabiendas de que se trata de una causa prácticamente perdida -en los días previos al encuentro, el secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, había dicho que no cree que el continente se encuentre en medio de una carrera armamentista-, el presidente peruano no evitó tocar el tema durante el discurso inaugural de la cumbre, el domingo. "He escuchado decir como un triste consuelo que esta es la región donde menos armas se compra. ¿Cuál es el consuelo?", declaró García.

En el borrador de la declaración final de la cumbre aún se menciona la propuesta peruana, pero en términos mucho más moderados y, en cierto modo, simplemente declarativos. En cambio, se espera un pronunciamiento en términos más fuertes respecto a la ley de inmigración de Arizona, que afecta a inmigrantes de todos los países miembros.

Clinton centra la atención

En la sesión de ayer por la mañana, sin embargo, el foco de atención estuvo en Clinton, quien llegó a la cumbre tras reunirse en el palacio de Gobierno con Alan García, y tocó en público otro tema clave que supuestamente los delegados iban a tratar en privado, al sugerir ante el pleno de la asamblea que se permita al Gobierno de Porfirio Lobo volver al foro continental. "Ha llegado el momento en que el hemisferio debe acoger nuevamente a Honduras en la comunidad interamericana. Hemos trabajado con muchos de ustedes para ayudar [a Honduras] a encontrar el camino democrático", señaló la secretaria de Estado de EE UU.

La propuesta de Estados Unidos fue recibida con tibieza por Brasil, que, a través del secretario general de su cancillería, Antonio de Aguilar Patriota, opinó que "el regreso de Honduras a la OEA tiene que estar asociado con medidas específicas para la redemocratización y el establecimiento de los derechos y garantías fundamentales", y señaló como "esencial" que se permita al depuesto presidente Manuel Zelaya participar nuevamente en la vida política de su país.

La cumbre, que concluirá mañana, se desarrolla bajo extremas medidas de seguridad. El domingo, dos activistas de una agrupación civil opositora al régimen venezolano, presidido por Hugo Chávez, fueron detenidos por la policía cuando repartían panfletos en las inmediaciones de dos hoteles donde se hospedan las delegaciones. A las pocas horas fueron liberados.