La Cámara de Casación suspende la puesta en libertad de 11 torturadores de la dictadura argentina
El secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, considera que el que los acusados volvieran a la calle "avergüenza al país y a la humanidad"
Sólo 24 horas ha tardado en dar marcha atrás el tribunal argentino que decidió dejar en libertad a 11 torturadores de la dictadura de Argentina (1976-83), entre ellos, Alfredo Astiz y Jorge Acosta. La Cámara de Casación ha rectificado ante la reacción indignada de organismos humanitarios y del Gobierno de Cristina Fernández. La decisión llega después de que el fiscal Raúl Plee pidiera la suspensión del fallo y anunciara que tenía previsto presentar un recurso.
Así, el Ejecutivo argentino había anunciado antes de esta decisión que apelaría a la Corte Suprema la orden de excarcelación.
La excarcelación fue ordenada al vencer los plazos legales para mantener en prisión preventiva a una persona sin sentencia firme.
El secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, consideró que la medida dictada el jueves por el máximo tribunal penal de Argentina "avergüenza al país y a la humanidad". Duhalde manifestó que, en todo caso, el Ejecutivo "respeta las resoluciones" de la Justicia. Duhalde aseguró incluso que la Secretaría de Derechos Humanos impulsaría el juicio político contra los magistrados Guillermo Yacobucci y Luis María García, integrantes de la Cámara de Casación.
Torturadores de la ESMA
En la lista de torturadores, además de Astiz y Acosta, están Juan Carlos Rolón, Raúl Scheller, Antonio Pernías, Jorge Rádice, Ernesto Weber, Víctor Cardo, Alberto González, Raúl González y Néstor Savio, todos requeridos por la Justicia de España. Estos torturadores participaron en la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), un edificio que se convirtió en el más siniestro centro de detención clandestina del régimen militar.
Según cifras oficiales, 18.000 personas desaparecieron en Argentina durante la guerra sucia, aunque organismos de derechos humanos elevan la cifra a 30.000. En 2004, el Gobierno argentino decidió que la ESMA dejara de pertenecer a la Armada para crear allí el Espacio para la Memoria, que abrió sus puertas el año pasado.
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