El Congreso de Ecuador aplaza la sesión sobre la consulta popular para reformar la Constitución

El Congreso de Ecuador ha aplazado, por "falta de garantías de seguridad", una sesión extraordinaria para tratar la convocatoria de una consulta popular -fijada por el presidente del país, Rafael Correa, para el próximo 18 de marzo- para la instauración de una Asamblea Constituyente de plenos poderes que permita reformar la actual Constitución.

Pese a la advertencia del Gobierno de que esperará hasta el jueves la resolución del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para dar vía libre a la consulta o nombrará un tribunal ad hoc especial para organizarla, el Parlamento ha vuelto a retrasar el asunto por segunda vez.

Según el diputado Luis Fernando Torres, del Partido Social Cristiano (PSC), que forma parte de la mayoría parlamentaria opuesta al Ejecutivo, la sesión no se llevó a cabo por "falta de garantías de seguridad", pues el edificio de la Cámara estaba "rodeado" por manifestantes partidarios del Gobierno.

Torres ha indicado que este martes el Congreso tratará de reunirse de nuevo y ha manifestado que el deseo de su grupo y, según él, de una mayoría de la Cámara (de tendencia populista de derecha) es dar paso a una Constituyente sin plenos poderes.

Este lunes, varios cientos de personas convocadas por grupos indígenas, políticos y sociales se reunieron frente al edificio del Congreso para exigir la instauración de una Asamblea Constituyente de plenos poderes. Un fuerte contingente policial, con equipos antidisturbios, custodiaban los bajos y el perímetro del edificio del Legislativo para evitar hechos violentos como los ocurridos el pasado 30 de enero cuando se suspendió el pleno que debía debatir la consulta.

El presidente del país, el izquierdista Rafael Correa, ha indicado que esperará hasta el jueves a que el Parlamento dé paso a la consulta y, si no lo hace, el Gobierno actuará sin tener en cuenta al Congreso.