Sharon sigue "muy grave pero estable"

El primer ministro israelí, Ariel Sharon, continúa "muy grave pero estable", tras la operación de estómago a la que fue sometido ayer, ha informado hoy la portavoz del Hospital Universitario Hadassah de Jerusalén, Bosem Levy. A preguntas de los periodistas, la portavoz ha afirmado que "su vida no corre peligro en este momento".

Sharon fue intervenido ayer por la mañana de urgencia debido al bloqueo del flujo sanguíneo en su aparato digestivo y a que parte de su intestino grueso presentaba signos de gangrena. Durante la intervención quirúrgica, los médicos le extrajeron 50 centímetros de ese órgano, un tercio de su extensión.

La portavoz ha indicado que el líder israelí sigue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos y aún no ha sido trasladado a su habitación en el Servicio de Neurocirugía, donde permanecía en estado de inconsciencia desde el pasado 4 de enero, cuando sufrió un derrame cerebral masivo.

El director del hospital, Shlomo Mor-Iosef, destacó ayer al concluir la operación que "lo más importante -en relación con la gravedad de su estado- no es el estómago sino el hecho de que no despierta de su letargo". Hasta la fecha, los médicos no han informado del daño sufrido por su cerebro.

Según fuentes médicas, pocos enfermos sobreviven más de un mes en un estado como el que presenta Sharon desde la intervención de ayer, la séptima desde que ingresó en el Hadassah. La gangrena en los intestinos es peligrosa, pues puede producir una infección general en el organismo y desencadenar la muerte.

Sharon, que cumple 78 años este mes, sufrió la hemorragia cerebral cuando se encontraba en el punto más alto de su popularidad, después de abandonar su partido, el derechista Likud, y fundar Kadima (Adelante). Pero difícilmente podrá volver a la vida política activa. Hasta la fecha, Kadima, encabezado por su sucesor, el primer ministro en funciones, Ehud Olmert, es el favorito en todos los sondeos sobre intención de voto con vistas a los comicios del próximo 28 de marzo.