Rusia tiende la mano a Ucrania en el conflicto del gas pero insiste en los precios de mercado

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha tendido este sábado la mano a Ucrania al proponer una moratoria de tres meses a los nuevos precios del gas, con la condición de que Kiev se avenga a firmar un nuevo contrato antes de que acabe el año. "He encomendado al Gobierno y a Gazprom que garanticen el suministro de gas a Ucrania durante el primer trimestre de 2006 a los precios de este año", ha señalado Putin durante su reunión con el primer ministro ruso, Mijaíl Fradkov. Italia, Francia, Alemania y Austria enviaron cartas a ambos para pedirles que aseguren el aprovisionamiento.

En virtud de esta propuesta, Ucrania seguiría pagando 50 dólares por cada mil metros cúbicos de gas hasta el 1 de abril de 2006, día desde el que tendría que pasar a los precios de mercado, es decir, 230 dólares por cada mil metros cúbicos de gas. "El nuevo contrato debe contemplar las propuestas de Gazprom de adoptar los precios de mercado en el segundo trimestre. En caso de ausencia de una respuesta clara, consideraremos que nuestra oferta ha sido rechazada", agregó.

Sin nuevo contrato no hay gas

Ésta es la segunda "concesión" de Putin a Kiev en dos días, ya que el jueves ofreció un crédito de 3.600 millones de dólares a Ucrania, oferta que fue rechazada por el presidente ucraniano, Víctor Yúshenko. La corporación Gazprom, que satisface la tercera parte de las necesidades de gas ucranianas, anunció seguidamente que esperará hasta la medianoche del 31 de enero para firmar el nuevo contrato. Sea como sea, el presidente de Gazprom, Alexéi Miller, insistió que, en caso de que Kiev se niegue a firmar el nuevo contrato en las próximas horas, interrumpirá el suministro de gas natural a Ucrania el domingo a las 8.00 hora de Madrid.

Miller acusó a las autoridades ucranianas de entorpecer de manera intencionada las negociaciones implicando a los socios europeos de Rusia para ganar posiciones en las negociaciones. Gazprom mantiene que 230 dólares es una tarifa preferencial, ya que otros países europeos, como Alemania, pagan 20 dólares más por cada mil metros cúbicos de gas. En respuesta a la nueva oferta de Putin, Yúshenko, que había pedido el viernes diez días de moratoria para la firma de un nuevo contrato, con el propósito de consultar a expertos internacionales, aseguró que por fin ambos países "se escuchan uno al otro".

"Hemos entrado en una fase constructiva de negociaciones. Aceptamos el paso a los precios de mercado, según los estándares europeos, pero debemos acordar las fechas y las cifras", señaló. Yúschenko calificó la noche del viernes de "inaceptable" los 230 dólares y puso sobre la mesa 80 dólares como última oferta. Ucrania se curó en salud, en caso de que Gazprom interrumpa el suministro, al firmar ayer un contrato con Turkmenistán para que este país del Caspio le suministre la mitad del gas que necesita en 2006.

Turkmenistán, uno de los máximos productores de gas del planeta, exportará el próximo año a Ucrania 40.000 millones de metros cúbicos de gas a razón de 50 dólares por cada mil metros cúbicos, aunque este precio podría aumentar al tener que pasar por territorio ruso. El dimisionario asesor económico de la presidencia rusa, Andréi Ilariónov, dio la razón a Ucrania y se mostró pesimista sobre la solución del conflicto, al considerar que "éste no tiene nada que ver con la economía, ya que se trata de una política imperialista".

La opinión de Rumanía

Ilariónov reveló que el contrato firmado en agosto de 2004 por Gazprom con la compañía estatal ucraniana Naftogaz establece que los 50 dólares por cada mil metros cúbicos de gas son el precio fijo hasta 2009. Por su parte, el presidente rumano, Traian Basescu, aseguró durante su visita a Moldavia, otra de las víctimas del alza de los precios, que las nuevas tarifas del gas ruso son el precio a pagar por las repúblicas ex soviéticas para conseguir la "independencia" definitiva de Moscú. "Deben decidir si quieren seguir siendo repúblicas soviéticas o países libres. Rusia no puede seguir subvencionando las exportaciones de gas a países con los que no mantiene unos lazos políticos de amistad", señaló.

En lo que sí se han comprometido ambos países es a garantizar los suministros con destino a la UE, que recibe el 25% de sus necesidades de Gazprom, el mayor productor y exportador de gas del mundo. No obstante, la UE convocó para el 4 de enero una reunión del grupo de coordinación del gas para analizar la crisis abierta entre Moscú y Kiev, entre dudas sobre la fiabilidad como principal fuente de energía de Rusia, que asume el primero de enero la presidencia del Grupo de los Ocho (G8). Además, Italia, Francia, Alemania y Austria enviaron sendas cartas a Rusia y Ucrania para pedirles que se asegure el aprovisionamiento.