Liberados los cinco ciudadanos alemanes secuestrados en Yemen

El secuestro del ex secretario de Estado alemán Jürgen Chrobog, de 65 años, y su familia -su mujer y sus tres hijos- en Yemen ha tenido un desenlace afortunado al ser liberados este sábado, tras cuatro días de cautiverio e intensas negociaciones con los secuestradores. Los secuestradores, según la Embajada de Yemen en Berlín, han sido detenidos y serán puestos a disposición de los tribunales.

El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank Walter Steinmeier, al confirmar la liberación de Chrobog y su familia, dijo que el secuestro no había tenido ninguna motivación terrorista. Steinmeier se comunicó por teléfono con Chrobog y dijo que él y su familia había sido bien tratados durante el secuestro y que se encuentran en buenas condiciones de salud. Sin embargo, Steinmeier dijo que, pese al buen trato, los últimos días no habían sido fáciles para la familia Chrobog. El Gobierno alemán se declaró, a través de Steinmeier, muy feliz por el desenlace del drama. Todo parece indicar que Chrobog cayó por casualidad en manos de sus captores, que desconocían su identidad y lo secuestraron como a cualquier otro turista.

La liberación de miembros de su tribu

Los secuestros de turistas europeos en Yemen han sido resueltos por lo general de forma pacífica y normalmente, como en el caso de Chrobog, los secuestradores tienen como meta lograr la liberación de miembros de su tribu que se encuentran en la cárcel. Las tribus que conforman Yemen tienen un gran poder en sus respectivos territorios y, según los expertos, en parte del país el Estado central tiene una influencia casi nula. En el caso de Chrobog y su familia, los secuestradores, miembros de la tribu de Abdalá, exigían que se pusiera en libertad a cinco de sus miembros involucrados en un ajuste de cuentas con la tribu vecina.

Luego, como fórmula de compromiso, los jerarcas de la tribu sugirieron que se detuviera también a cinco miembros de la tribu enemiga de Al Riad. Al parecer, entre algunos de los secuestradores hubo resistencia a aceptar ese compromiso por lo que la liberación, que se esperaba para esta mañana, se aplazó durante algunas horas que fueron especialmente tensas. Curiosamente, durante los años en que Chrobog fue secretario de Estado en el Ministerio de Exteriores se ocupó con frecuencia de casos de turistas secuestrados y en varias ocasiones estuvo al frente de un gabinete de crisis para tratar casos similares.

Hace poco, durante el secuestro de la arqueóloga alemana Susanne Osthoff en Irak, el propio Chrobog había dicho que quien corría determinados riesgos no podía esperar milagros por parte del Gobierno y esta declaración fue algo que se volvió en su contra después de caer él mismo con su familia en manos de secuestradores. El Ministerio de Exteriores advierte desde hace mucho del peligro de los viajes a Yemen. No obstante, a diferencia de lo que ocurre en otros países árabes, los turistas europeos que caen en manos de secuestradores en Yemen suelen ser bien tratados por sus captores.

Fin de año, en Aden

Chrobog y su familia han sido transportados a la ciudad costera de Aden donde al parecer pasaran el fin de año. Además, el presidente de Yemen, Alí Abdalá Salih, quiere entrevistarse con Chrobog en Aden. Chrobog, su esposa Magda y sus tres hijos adultos cayeron en manos de sus captores en 28 de diciembre cuando se encontraban en un restaurante situado en la carretera entre Aden y Schabwa, ciudad situada unos 450 kilómetros al este de Sanaa, la capital del país.

El 29 de diciembre hubo una primera ronda de negociaciones con los secuestradores y durante unas horas la liberación de los rehenes se creyó inminente. Sin embargo, tras el fracaso de las primeras negociaciones, la zona donde se encontraban los secuestrados fue sitiada por el Ejército lo que provocó momentos de crisis durante el 30 de diciembre. Pese a ello, Steinmeier reiteró permanentemente su confianza de que la liberación se produciría antes del fin de año.