Uribe suspende el diálogo con el jefe de los paramilitares y autoriza su captura

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, ha suspendido el proceso de paz con el grupo del jefe paramilitar ultraderechista Diego Adolfo Murillo, alia Adolfo Paz y ha ordenado a la Policía Nacional su captura, según han anunciado hoy en Bogotá portavoces del Ejecutivo.

El dirigente ha adoptado estas decisiones tras considerar que el líder de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) incurrió en una violación del cese de hostilidades con el triple homicidio que le ha imputado la Fiscalía General de la Nación. Es la primera vez que se imputa a un negociador este delito.

Una misión judicial ha llegado esta mañana por vía aérea a la zona de distensión en la que se desarrollan los diálogos de paz, con el apoyo de efectivos de la Policía Nacional con el objetivo de hacer efectiva la detención, según informa en su página web el diario Tiempo de Bogotá.

"El Gobierno nacional reitera que el proceso de paz y la zona de ubicación no pueden servir de paraíso de impunidad", según un comunicado leído a la prensa por el portavoz de la Casa de Nariño (Ejecutivo), Ricardo Galán.

La polémica zona de concentración

Esta nueva orden plantea serios interrogantes sobre el uso que las AUC están dando a una zona de concentración, que les otorga una especie de inmunidad. Algo similar sucedió con la antigua zona de distensión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FAR), que permitió a la guerrilla estar lejos del alcance de las autoridades mientras cometía crímenes fuera de ella.

Paz tiene también una orden de captura por secuestro y Estados Unidos pide su extradición por cargos de narcotráfico. Una fuente de los paramilitares citada por Tiempo dijo ayer que el líder ultraderechista se pronunciará en los próximos días pero que insiste en que no es responsable del asesinato.