La justicia de Florida rechaza la última petición de reimplantar la sonda a Terri Schiavo
Los padres de la mujer, en coma profundo desde hace 15 años, no realizarán más apelaciones federales para mantener a su hija con vida
El último intento judicial para reimplantar la sonda a Terri Schiavo, la mujer estadounidense de 41 años que lleva 15 en estado vegetativo, ha sido rechazado esta tarde por un juez estatal de Florida. El magistrado, George Greer, ha desestimado la petición para que se administraran a Schiavo líquidos con el fin de estudiar si realmente había intentado hablar, tal como argumentaban sus padres. Greer es el mismo juez que ordenó quitar la sonda que alimentaba a Schiavo el pasado 18 de marzo.
Momentos antes de conocerse esa decisión, el padre de Terri Schiavo, Bob Schindler, había hecho un llamamiento ante los medios de comunicación para que "cualquiera que tenga poder para salvarla haga algo y la salve". En unas breves declaraciones delante del centro asistencial donde se encuentra ingresada su hija, en Pinellas Park, Schindler ha asegurado que Terri "lo está haciendo sorprendentemente bien dadas las circunstancias".
"Está luchando una tremenda batalla para vivir. No quiere morir", ha añadido el padre, quien ha añadido que, a pesar de que su hija muestra síntomas de deshidratación e inanición como los ojos hundidos, la piel escamosa y una leve respiración, "no es demasiado tarde para salvarla". Los expertos creen que Terri podría sobrevivir aún otra semana en estas circunstancias.
Terri dijo "Ahhhhh" y "Waaaa"
La petición rechazada por el juez Greer indicaba que Terri habría emitido algunos sonidos, que sus padres interpretaron como un posible intento de hablar, cuando hace ocho días se le retiró la sonda de alimentación. Sus padres aseguran que dijo "Ahhhhh" y "Waaaa" cuando le pidieron que repitiera la frase "I want to live" (en español, "quiero vivir"). Según la moción, con esos sonidos Terri podría haber querido decir "quiero vivir", por lo que se pedía al juez que se le administrara un mínimo de líquidos para explorar esta posibilidad. Los médicos ya señalaron en el pasado que los ruidos que emite la mujer son normales en personas en estado vegetativo.
Previamente, uno de los abogados de los padres de Terri ha anunciado hoy que no habrá más apelaciones a tribunales federales y que la última posibilidad estaba en los tribunales de Florida. Ayer, un tribunal de apelaciones de Atlanta (Georgia) rechazó la petición de los padres para que sea nuevamente conectada a la sonda. Era la tercera vez en cuatro días que los jueces rechazan las apelaciones de los padres de Terri.
Tras este último no, el abogado, David Gibbs, ha admitido hoy que "no hay más apelaciones federales" en el caso, ya que "no hay nada más que pueda llevarse ante los tribunales federales". El gobernador del Estado, el republicano Jeb Bush, ha señalado con pesar que ya ha hecho todo lo posible legalmente para apoyar a los padres de Terry.
Nueve detenidos por intentar entrar en el hospital
Al menos nueve personas fueron detenidas ayer por la policía cuando intentaban entrar en el hospital donde agoniza Terri Schiavo. Algunos de los detenidos, entre ellos niños, trataron de acceder al centro médico al tiempo que llevaban, en un simbólico gesto de solidaridad, recipientes con agua y alimentos para Terri.
Grupos cristianos contrarios a la eutanasia, así como amigos y simpatizantes de los padres de Terri, protestan frente al cordón policial que controla el acceso a la clínica y rezan para que le sea conectada de nuevo a Schiavo la sonda de alimentación.
Por otra parte, un varón estadounidense identificado como Richard Alan Meywes, residente en el estado de Carolina del Sur, fue arrestado ayer por agentes del FBI, acusado de haber ofrecido una recompensa económica de 25.000 dólares para quien acabara con la vida de Michael Schiavo, esposo de Terri Schiavo, según ha informado la cadena norteamericana de televisión CNN.
