Al menos 50 muertos en un atentado con coche bomba junto a una comisaría al sur de Bagdad

Al menos 50 personas han muerto y otras 150 han resultado heridas en Irak al estallar un coche bomba junto a un cuartel en la localidad de mayoría chií de Iskandiriya, al sur de Bagdad. Se trata de una de las acciones más sangrientas desde el inicio de la guerra de Irak.

Fuentes sanitarias de esta pequeña villa, emplazada a 40 kilómetros de la capital, no descartan que el número de muertos aumente debido al grave estado en el que se encuentran muchos de los heridos. Según la Policía iraquí, la mayoría de las víctimas son civiles que transitaban por las inmediaciones de la comisaría de policía en el momento del atentado.

Algunos de los heridos han sido trasladados a centros hospitalarios de Bagdad y a centros médicos de las unidades militares de Polonia destacadas en la zona, ya que la capacidad sanitaria de Iskandiriya se ha visto sobrepasada.

Tras conocer la noticia, las tropas estadounidenses se han puesto en marcha hacia el lugar del atentado, que ha sido inmediatamente acordonado.

Atentado contra un líder chií

Pero esta no ha sido la única acción de la resistencia a lo largo del día: Horas antes, un kamizake se ha inmolado junto a la residencia de un líder local chií en la ciudad de Ramadi, a unos cien kilómetros al oeste de la capital iraquí. No ha habido que lamentar víctimas, aunque cuatro guardaespaldas del líder tribal han resultado heridos.

El último ataque terrorista masivo tuvo lugar el pasado día 1 de este mes en la ciudad de Erbil, en el Kurdistán iraquí. En aquella sangrienta acción perdieron la vida cien personas, pasando a ser el atentado más grave desde que comenzara la guerra de Irak.

Una guerra civil

El atentado de hoy se produce al día siguiente de que portavoces militares estadounidenses en Irak advirtieran sobre un supuesto plan de la red terrorista internacional Al Qaeda de incitar una guerra civil entre las comunidades musulmanas chiíes y suníes del país.

Mientras tanto, un equipo de expertos de la ONU continúa entretanto sus gestiones en Irak para estudiar la posibilidad de celebrar elecciones en el país antes del traspaso de poder, previsto para junio según el plan de EEUU, al que se oponen los líderes chiíes.