Una recompensa de 160.000 dólares para quien aporte pistas del asesino del rifle
Bush ofrece ayuda federal para lograr la captura del francotirador de Washington
La policía de Washington y los agentes federales siguen sin tener pistas fiables del asesino en serie que ha matado en la última semana a seis personas y ha herido de gravedad a otras dos con un fusil de asalto equipado con mira telescópica. En estos momentos se siguen más de mil pistas y se han ofrecido 160.000 dólares a quien dé información que conduzca a la captura del francotirador que siembra el terror en los alrededores de Washington.
No osbtante, los ánimos entre la policía del área metropolitana de Washington siguen bajo mínimos ya que son conscientes de los escasos éxitos que la investigación les ha deparado. "Me gustaría poder decir algo que llevara calma a los ciudadanos, pero no estoy seguro de poder hacerlo", ha dicho hoy Charles Moose, jefe de la policía del condado de Montgomery (Maryland), donde la pasada semana fueron asesinadas cinco personas.
Pero el asesino se esfuma. Nadie lo ha visto y tan solo se sabe que, en algún momento, el pasado jueves, pudo viajar en un camión blanco con aparentes rastros de sangre en una puerta, según el relato de algunas personas. Mientras tanto, la policía y los mismos ciudadanos de las zonas residenciales que rodean la capital de EE UU se encuentran en estado de alerta.
Estrictas medidas de seguridad en los colegios
Después de lo ocurrido el lunes, cuando resultó herido un niño de 13 años que iba a una escuela de Bowie, en el condado de Prince George (Maryland), todos los colegios del área han abierto hoy sus puertas rodeados de estrictas medidas de seguridad. La policía ha custodiado las inmediaciones de las escuelas, donde, en muchos casos, se habían apostado también equipos de televisión ansiosos de tomar declaraciones a los padres que acudían a llevar a sus hijos al colegio.
A pesar de la difícil situación que la presencia del francotirador ha causado en la región, las autoridades han pedido a los padres que lleven a sus hijos al colegio por estimar que los niños estarán más seguros en sus aulas que en la calle. A los menores no se les permite salir al exterior para el recreo desde el pasado jueves, y se han cancelado también todas las actividades al aire libre, como deportes o excursiones. Pero la policía reconoce que poco más se puede hacer.
El propio Moose, quien en una de las muchas conferencias de prensa celebradas desde el lunes no pudo contener las lágrimas, aseguró hoy que "resulta muy complejo responder a la pregunta de cómo evitar convertirse en objetivo" del francotirador.
"Actos de cobardía"
A punto de cumplirse una semana del comienzo de los crímenes que están sembrando el pánico en las cercanías de Washington, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ha ofrecido ayuda federal para capturar al francotirador. El presidente calificó anoche los sucesos de "actos de cobardía y sin sentido", al tiempo que autorizó a los peritos forenses y expertos en perfil psicológico del Gobierno federal a que ayuden en las investigaciones.
Los expertos en asesinos en serie le perfilan como un hombre joven, enfermo mental o enfadado con el mundo, muy metódico, con perfecta puntería y ansioso por llamar la atención, por lo que las autoridades temen que el francotirador continuará burlando los esfuerzos de captura.
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