El actor Armie Hammer rompe su silencio tras las acusaciones de abusos y canibalismo que fulminaron su carrera

Hace dos años que el actor estadounidense Armie Hammer (Santa Mónica, Estados Unidos, 36 años) fue acusado de abusos sexuales y canibalismo, un hecho que hizo que su exitosa carrera cinematográfica se fuera a pique. Desde entonces, la exestrella de Hollywood, que intervino en películas de gran éxito como La red social (2010), El llanero solitario (2013) o Call Me by Your Name (2017), quiso desaparecer del mapa, e incluso se mudó a las islas Caimán, donde creció, con el objetivo de pasar totalmente desapercibido. No se había pronunciado nunca sobre las acusaciones que le llevaron a ingresar en rehabilitación para tratar sus adicciones tras las acusaciones de canibalismo y acoso. Hasta este 3 de febrero: el pasado viernes dio su primera entrevista para hablar de todo lo ocurrido.

Hammer ha roto así su silencio en la que ha sido su primera entrevista desde las acusaciones, y lo ha hecho en Air Mail, una revista digital semanal. En la entrevista, el actor admite haber sido abusivo emocionalmente con sus exparejas, pero niega haber cometido ninguna violación. En todo momento niega la acusación de violación de una mujer, con la que mantuvo una relación intermitente a lo largo de cuatro años y a la que se conoce Effie. Y asegura que se trató de algo que describe como una escena “no consensual consensuada” en la que ella supuestamente planeó todos los detalles. “Estoy aquí para reconocer mis errores, para responsabilizarme del hecho de que fui un cabrón y un egoísta, que usaba a la gente para hacerme sentir mejor”.

El actor se vio envuelto en un escándalo en febrero 2021 tras la publicación de varias conversaciones suyas que destapaban su fetichismo sexual con prácticas caníbales. Varias mujeres le acusaron de abusos sexuales e, incluso, de violación. Denuncias que fueron investigadas por la policía de Los Ángeles (EE UU). Entre las denunciantes, estuvieron las influencers Courtney Vucekovich o Paige Lorenze. Él ahora dice que las “dinámicas de poder” con sus exparejas estaban desequilibradas porque él era una estrella, y reconoce que abusó emocionalmente de ellas, pero reduce su comportamiento a lo que describe como ser “estúpido” y “egoísta”.

Fue entonces cuando Hammer, explica, decidió alejarse de los focos, las alfombras rojas y su trabajo como actor, y cuando tuvo ideas suicidas: “Me adentré en el océano y nadé tan lejos como pude esperando ahogarme, ser arrollado por un barco, o devorado por un tiburón”. “Entonces me di cuenta de que mis hijos estaban en la orilla, y que no podía hacerles eso”, añade el actor, padre de dos hijos con la presentadora de televisión Elizabeth Chambers y de la que separó en 2020 antes de que las acusaciones salieran a la luz. Estuvieron 10 años juntos, se casaron en 2010.

Efectivamente, tras las acusaciones, Hammer decidió retirarse del rodaje de Una boda explosiva, una comedia que iba a protagonizar junto a Jennifer Lopez y que se ha estrenado con escasa presencia mediática en junio de 2022 con Josh Duhamel como actor protagonista. Además, también abandonó su papel en la serie que trata acerca de cómo se creó la película El padrino (1972), en la que interpretaba al productor Al Ruddy.

En la entrevista, Hammer también confiesa haber sufrido abusos sexuales cuando tenía 13 años por parte de un cura protestante y considera que este episodio fue el que originó su interés por las prácticas de sumisión y dominación sexuales conocidas como BDSM (siglas de Bondage, Dominación-Disciplina, Sumisión-Sadismo, Masoquismo). “Eso hizo que la sexualidad entrara en mi vida de una manera en la que estaba completamente fuera de mi control”. “En esa situación estuve indefenso. La sexualidad me fue introducida de una manera aterradora en la que yo no tenía el control. Entonces mi interés se desarrolló de esa manera: sexualmente, quiero tener el control en la situación”, añade el actor.

La polémica en torno a Hammer volvió al foco a finales 2022 con la docuserie La saga de los Hammer: escándalo y perversión (HBO Max), tres truculentos episodios en los que se repasa el escándalo que se destapó cuando varias usuarias de Instagram hicieron pública la correspondencia que mantenían con él y airearon sus fantasías caníbales y en la que se daba voz a dos de sus exparejas, Courtney Vucekovich y Julia Morrison, que ratificaban las acusaciones de abuso.

En la actualidad, el actor ha estado trabajando como vendedor de multipropiedades en las islas Caimán, y dice que se ha sometido a tratamiento y que está agradecido por su recuperación, por la que estuvo nueve meses ingresado —salió del centro de rehabilitación en diciembre 2021—. Pero Hammer también lanza una crítica a la cultura de la cancelación que, opina, no da una oportunidad a la rehabilitación. En la entrevista, también confiesa la ayuda que recibió de parte del también actor Robert Downey Junior y cómo le apoyó durante su caída en desgracia y le encaminó hacia la recuperación.

También reflexiona sobre las posibilidades de regresar a Hollywood, algo que no cree que vaya a suceder pronto: “Nadie me contratará. Nadie me asegurará. No puedo obtener una fianza para un proyecto, nada”. “Y nadie me va a tocar porque si me contratan, entonces son las personas que apoyan a los abusadores”, dice. Ahora, cuenta, su vida está centrada en ayudar a un compañero a recuperarse de sus adicciones.