Britney Spears no olvida: quiere sentar a su padre en el banquillo y recuperar su dinero
Los abogados de la cantante, que logró la libertad de su tutela paterna el pasado septiembre, quieren que Jamie Spears se enfrente a un tribunal para responder a sus “obligaciones legales y fiduciarias”
“El señor Spears puede correr, pero no puede esconderse para siempre”. Esas son las palabras, claras como el agua, de los abogados de Britney Spears sobre su padre James, Jamie, Spears, de 69 años, quien durante 13 años y hasta el pasado mes de septiembre fue su tutor legal. Aunque la cantante lleva ocho meses de ansiada libertad, no olvida lo que sufrió durante los años en los que su padre controló su vida personal y profesional, además de su fortuna. Y por ello ha decidido que su equipo legal le persiga en los tribunales.
Los abogados de la cantante acusan a James Spears de estar evitando, desde hace meses, hacer una declaración legal en el tribunal competente. La primera vez que se lo notificaron fue el pasado 20 de octubre, apenas tres semanas después de que la artista lograra la libertad, tal y como ha podido saber en exclusiva la revista People. Por ello, le acusan de “esconderse de sus obligaciones legales y fiduciarias”.
“Después de haber usado durante más de 13 años el dinero de su hija para costear sus costes legales y sus gastos, por primera vez el señor Spears tendrá ahora que correr con sus propios costes legales”, escribe Mathew S. Rosengart, abogado de la cantante, en los documentos obtenidos por la publicación. Como queda claro en las declaraciones, el dinero es importante en el caso. Los letrados de la cantante acusan al padre de la misma de haberse quedado con 6,3 millones de dólares (5,9 millones de euros) de la fortuna de Britney Spears, y también de “pagar a sus socios decenas de millones más” a lo largo de una tutela que califican de “corrupta y conflictiva”. De hecho, justo antes de ser liberada de la custodia, el abogado de Spears ya explicó que Jamie quería recibir dos millones de dólares antes de dejar de tutelarla.
Los abogados llevan meses intentando que James Spears les conteste a las cuestiones sobre “asuntos pendientes”. En concreto, le han planteado que explique cómo manejó el dinero de su hija durante esos 13 años pero, aseguran, él está “obstruyendo y obstaculizando” esa declaración. Le acusan de tener “asuntos pendientes” que está evitando cerrar con ellos y que ha rechazado algunos de los avisos que le han enviado para que declare, afirmando que no estaba “disponible” y que él ahora vive en Kentwood (Luisiana), y que las peticiones de declaración son para Los Ángeles, en el Estado de California.
Pocos días antes de ser liberada de su tutela, se supo que Britney Spears tenía interceptadas y vigiladas todas sus comunicaciones gracias a un dispositivo de control electrónico instalado por su padre en su móvil. Los abogados ahora también acusan a James Spears de que está evitando entregar “las comunicaciones relacionadas con el impactante aparato de vigilancia establecido para espiar a su hija”.
Jamie Spears ha sido el tutor legal de Britney Spears desde el año 2007 hasta septiembre de 2021. El año pasado, en julio, la cantante logró finalmente su propio equipo legal; como su padre controlaba todo en ella, también había establecido quién era su abogado, que llegó a comparar sus capacidades con las de una persona en coma. Sin embargo, con la llegada de su nuevo abogado, Rosengart, la situación dio un vuelco.
Tras años en los que no se había escuchado su opinión ni había podido alzar la voz, Spears pudo hablar el año pasado en un tribunal, lo que fue clave también para lograr el cambio de abogado. Una declaración impactante en la que aseguró que tanto su padre como “todos los involucrados en esta custodia”, incluida su mánager, “deberían estar en prisión”. “Antes creía que nadie me iba a creer. Creía que la gente se burlaría de mí. Pero ahora quiero recuperar mi vida. Ha sido suficiente”, sentenció.
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