Samantha Markle demanda a su hermana Meghan por “mentir” en la entrevista con Oprah Winfrey
La cuñada de Enrique de Inglaterra acusa a la duquesa de dar “afirmaciones falsas y maliciosas” sobre su infancia, afirmando que venía de un entorno de pobreza, y de ser parte de las causas del infarto de su padre, Thomas
El 8 de marzo de 2021, hace ahora un año, todo saltaba por los aires en el seno de la familia real británica. Esa madrugada, el príncipe Enrique de Inglaterra y su esposa, Meghan Markle, concedían una entrevista a la popular Oprah Winfrey en la que dejaban claros los motivos por los que habían dejado atrás a los Windsor, hablando de racismo o de problemas de salud mental. Una emisión televisiva que impactó al mundo y a la familia de Enrique y, según se ha sabido ahora, cuando ha pasado un año de todo aquello, también a la de Markle. Tanto que han decidido denunciarla por sus declaraciones.
Samantha Markle, de 57 años y hermana por parte de padre de la duquesa de Sussex, de 40, lleva años afirmando que la versión de Meghan Markle es una gran mentira que ella misma ha inventado para que toda la narrativa que vende sea más edulcorada. Ahora, ha decidido llevar su versión a los tribunales e interponer una demanda contra ella por las declaraciones que hizo en el programa de Winfrey. En documentos obtenidos por medios estadounidenses como TZM y Page Six, Samantha acusa a Meghan de pronunciar “afirmaciones falsas y maliciosas” durante la emisión, pero también a través de la biografía Finding Freedom, publicada en verano de 2020 (en España titulado Meghan y Harry. En libertad, y editado por HarperCollins Ibérica), al que considera como “un libro de mentiras”.
Por todo ello, Samantha Markle pide 75.000 dólares (unos 68.000 euros) más los costes de los abogados. El abogado de los duques, Michael Kump, ha hablado acerca de la querella, confirmando, por tanto, su veracidad, aunque ha querido minimizar su impacto. “Esta demanda absurda y sin fundamentos es simplemente la continuación de un patrón de comportamiento perturbador. Le prestaremos la mínima atención necesaria, que es todo lo que merece”.
Los documentos afirman que la difamación se basa en que Markle aseguró que “la demandante”, es decir, Samantha, “no tenía relación alguna con su hermana Meghan, eran prácticamente desconocidas”. De hecho, una de las cuestiones que señala la hermana mayor es que la pequeña llegó a decir ante Winfrey que era “hija única”. También asegura que la duquesa miente acerca de los tiempos, de los momentos en los que se han visto y de la última vez que coincidieron, que ha sido más reciente de lo que afirma. Además, Samantha Markle también la acusa de inflar su historia y mentir sobre ella: “Creó una carrera lucrativa vendiendo historias falsas a los tabloides y programas de televisión cuando al parecer no sabe nada sobre la infancia de la acusada”.
Una de las cuestiones que Samantha Markle saca a relucir en su demanda es que Meghan Markle trata de vender ante el mundo la historia de que llegó a la fama y después a la realeza desde la nada. “Meghan afirmó de forma falsa que se crio a sí misma desde, básicamente, la pobreza, y que se vio forzada a trabajar desde los 13 años en trabajos mal pagados para “llegar a fin de mes”, se lee en la demanda. Sin embargo, asegura que fue su padre, Thomas, quien pagó los costes de la educación de Meghan Markle, incluida su matrícula en la universidad Northwestern y los gastos derivados de su estancia para estudiar en Illinois.
Además, otra de las cuestiones de las que la cuñada de Enrique de Inglaterra se queja es el mal trato público que Markle le ha proporcionado a su padre desde que empezó la relación con el príncipe. Siempre según su demanda, su hermana ha mentido sobre él para que su historia “no interfiera ni contradiga la falsa narrativa y la historia de cuento de hadas inventado”.
De hecho, incluso acusa a su hermana de ser, en parte, el motivo que provocó los problemas cardiacos del hombre hace cuatro años. Según Samantha, Thomas Markle sufrió “dos infartos antes de la boda de la demandada, en mayo de 2018, a causa del estrés asociado con la misma, por el acoso y la persecución constante por parte de paparazis y otros medios, y por los dolorosos mensajes recibidos por parte de la demandada y del príncipe Enrique; el cardiólogo le avisó de que estaba demasiado enfermo para viajar a Inglaterra; el señor Markle nunca rechazó asistir a la boda, sino que fue una recomendación médica”.
La demanda llega tarde, un año después de la entrevista y dos del libro, pero el posible juicio que se lleve a cabo o el acuerdo extrajudicial que lleguen a alcanzar las partes serán sin duda un material de peso para el segundo libro que Samantha Markle anunció que estaba escribiendo, tras publicar un primero hace un año, que pasó por las librerías con menos gloria de la que ella preveía.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.