_
_
_
_

Laura Visco, la mujer que quiere que las amigas hablen de dinero: “Si le dedicásemos el 1% de lo que hablamos de amores, seríamos millonarias”

La argentina afincada en Barcelona es la fundadora de Amiga! Hablemos de Plata, una plataforma que busca normalizar las conversaciones en torno a la economía entre mujeres. “El objetivo es ofrecer un manual de supervivencia para reclamar lo que les corresponde”, propone

Laura Visco
Laura Visco, fundadora de la plataforma Amiga, Hablemos de Plata, posando frente a un supermercado polaco en una foto cedida por ella.
Ixone Arana

Hasta finales de los años setenta, las mujeres en España no podían abrir una cuenta bancaria a su nombre sin el permiso de su marido, padre o tutor. “Por algo nuestras madres y abuelas nos pasaron la receta del pionono y no de cómo invertir en Bolsa”, critica Laura Visco (Buenos Aires, 45 años). Para ella, “no hay nada más feminista que hacer plata” y, una vez que la tienes, hacerla circular de otra manera. “Mi propósito es simple, pero firme: no voy a parar hasta que manejemos la caja grande del mundo”, sentencia en la publicación de Instagram con la que anunciaba el pasado mayo el nacimiento de Amiga! Hablemos de Plata, la plataforma que Visco ha creado para normalizar las conversaciones sobre dinero entre mujeres. “El objetivo no es hacer las paces con el capitalismo, sino ofrecer a las mujeres un manual de supervivencia que les permita reclamar lo que les corresponde”, advierte en su página web.

De momento, Amiga! Hablemos de Plata tiene forma de newsletter gratuita ―cada tres semanas―, y este año se va a materializar también como libro. De hecho, fue escribiéndolo como se le ocurrió a Visco la idea de convertirlo en algo más participativo. “No servía de mucho quedarme yo sola con toda esa información, necesitaba compartirla para que otras mujeres puedan alcanzar la libertad financiera que ellas quieran y posicionarse en un lugar más cómodo en el sistema, que a menudo vive del agotamiento de las mujeres, de que no tenemos tiempo para nada”, explica por teléfono a EL PAÍS. En menos de una semana, tenía más de mil suscriptoras, un número que ya se ha triplicado y sigue subiendo. “Teníamos muchas ganas de hablar del tema”, deduce esta argentina afincada en Barcelona.

Visco no se presenta como experta financiera ni economista. Es publicista de formación, pero aprendió a gestionar su dinero para alcanzar la tan ansiada independencia económica que ahora trata de transmitir al resto de mujeres con un lenguaje directo y con un toque de sarcasmo. Como una amiga más. “Me formé en comunicación y lo que hago es explicar las cosas como yo las tuve que aprender. Creo que lo que funciona es el tono, que es mucho más amigable, no tan áspero como se suele abordar el mundo financiero, que está lleno de tecnicismos. Se trata de no hacernos las tontas ante las desigualdades, no estoy diciendo: ‘¡Vení al maravilloso mundo de la inversión!’, sino que explico por qué no lo entendemos, porque es un mundo que se hizo sin nosotras y es obvio que nos parece muy ajeno. Hay que explicar todo eso y empezar la conversación desde ahí”, propone.

Maria Santarelli es una de sus suscriptoras. Tiene 35 años y también es porteña, pero vive en Suiza, donde trabaja como arquitecta. Gracias a Amiga! Hablemos de Plata ha conseguido un aumento de sueldo. “Ir a tocar el tema del salario era algo muy, muy lejano en mi cabeza”, explica por teléfono. “Me sentía en desventaja, pero no me atrevía a decir nada porque parece que hay que quedarse callada y pasar camuflada”. Es un problema que comparten muchas mujeres, por eso Visco decidió centrar una de sus newsletters en los obstáculos añadidos con los que parten ellas a la hora de atreverse a negociar sus salarios. Para los hombres, esta negociación es comparable a ganar un partido de fútbol, mientras que para las mujeres, se asemeja a una visita al dentista, según un estudio recogido en el libro Women Don’t Ask que Visco compartió con sus seguidoras. “Ella proponía que pusiera en valor las diferencias que yo tenía respecto a los demás y que pensara en qué aportaba, pero no en un sentido de ‘¿y vos qué podés aportar a la empresa?’, sino algo realmente concreto, tipo: ‘¿Ché, qué aportaste el año pasado?’. Me di cuenta de que el listado es bastante grande y me dio mucha fuerza. Y no sentirme sola también me dio impulso para poder abordar este tema”, reconoce Santarelli.

Para la arquitecta, tener un espacio donde informarse, asesorarse y compartir experiencias sobre negocios con otras mujeres ha marcado un antes y un después. “Siento que hice como un clic que a mí me llegó a los 35, un hombre nace con ello”, opina. Visco cree que el principal problema es que las mujeres no han sido criadas para hablar de este tema ―un estudio de Merrill Lynch revela que el 61% de las mujeres prefiere hablar de su propia muerte antes que de dinero―. “Nos parece hostil, agresivo, poco femenino”, apunta. A lo que sí dedican demasiadas conversaciones, según ella, es a hablar de hombres, algo que tampoco considera casual: “Cuando nos juntamos, casi todas nuestras conversaciones giran en torno a cómo te fue la cita con tal o los problemas con tu marido, pero también porque pensamos que nuestro futuro económico depende de eso, de encontrar un otro. Fuimos educadas pensando que nuestra economía va a depender siempre de otro, que será nuestra salvación, que por nosotras mismas no podemos. Si dedicásemos un 1% del tiempo y la energía que dedicamos a hablar de amores a hablar de dinero, seríamos millonarias”.

Uno de los últimos temas que Visco ha tratado en sus entradas, para cuya preparación suele contactar con expertos que aportan el enfoque especializado del que ella a veces carece, es el de cómo tratar el tema del dinero dentro de la pareja, un asunto muy solicitado por sus seguidoras. “Parece que nos lanzamos a casarnos y a convivir sin hablar del tema y después suceden desastres”, advierte. “Aunque ganemos más, la mayoría de las mujeres todavía dejan las decisiones financieras en manos de su pareja o su padre. Sí, estamos facturando, como dice Shakira, pero una vez que lo facturamos no decidimos hacia dónde va”, apunta la empresaria, para quien es alarmante que el 58% de las mujeres casadas todavía pregunten a su marido qué hacer con su dinero, según datos de la compañía de servicios financieros UBS.

Desde cómo funciona el Banco Central hasta un análisis detallado de lo que supone la victoria de Donald Trump a nivel económico mundial, los temas que trata la newsletter abordan la conversación sobre el dinero desde una perspectiva de género, histórica y cultural. “Me están pidiendo mucho que hable sobre inversión”, apunta Visco. Además de la información que llega cada tres semanas a la bandeja de correo de sus suscriptoras, Amiga! Hablemos de Plata también ofrece charlas y capacitaciones a empresas, universidades y marcas que deseen fomentar una mejor relación entre las mujeres y el dinero. Además, ha abierto un espacio de consultoría para crear estrategias que integren la educación financiera con perspectiva de género, abordando desde las brechas salariales hasta clases de negociación de sueldo. “Me escriben muchas chicas que usaron los consejos y les fue bien y ahí es donde se completa la rueda del proyecto”, comenta la fundadora.

El enfoque de Visco es claro: “No vengo a dar cátedra ni a contar mi historia de éxito. Quiero ser esa amiga con la que hablar de plata de frente y sin vueltas, desde mi experiencia, con empatía y honestidad”. Sin embargo, la idea también tiene críticos, en masculino, que no dudan en mostrar su desaprobación con el proyecto en las publicaciones que comparte en Instagram. El 10 de enero, la argentina les dedicó una carta abierta a modo de contestación. “Señor machirulo, para que quede claro: nadie quiere su trabajo, nadie está detrás de su sueldo y, créame, su aprobación tampoco nos quita el sueño”, dice en una parte del mensaje. “Esto no se trata de arruinarle la vida, sino de arreglar un sistema que no funciona para nadie (ni siquiera para usted). [...] Aquí nadie le va a robar nada, pero si siente que sus privilegios están temblando... bueno, quizás sea momento de preguntarse por qué eran tan frágiles en primer lugar”, zanja.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Ixone Arana
Es redactora de Estilo de Vida. Antes de incorporarse a EL PAÍS, donde también ha escrito para la sección de Madrid, trabajó en 'Cinco Días', principalmente en la sección de Fortuna. Graduada en Periodismo por la Universidad del País Vasco y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_