Las urgencias de la Comunidad de Madrid lanzan un SOS: “Hay más de 100 pacientes pendientes de ser ingresados”
La región contrató a 1.800 profesionales sanitarios en noviembre para afrontar la campaña de invierno pero algunos hospitales madrileños denuncian que esta medida no es suficiente
El invierno llega con la lotería de Navidad y con él la gripe estacional y otras afecciones respiratorias propias de la época. Las urgencias de los hospitales madrileños han notado en los últimos días un incremento de la demanda asistencial. El Plan de Invierno implantado por la Comunidad de Madrid desde mediados de noviembre ha supuesto la contratación de 1.800 profesionales sanitarios para esta campaña, aunque esta medida no parece ser suficiente para dar respuesta a la falta de recursos materiales y humanos en algunos centros madrileños. “Hay más de 100 pacientes de urgencias pendientes de ser ingresados y hemos tenido tardes que ha habido hasta 200”, se queja Gregorio Ramírez, Secretario General de la sección sindical de UGT en el Hospital Gregorio Marañón. No es el único centro que lo sufre. Trabajadores del Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares o el Hospital Severo Ochoa también se quejan.
Las urgencias del Marañón llevan cuatro días “totalmente colapsadas”. Según Ramírez, están recibiendo más de 600 urgencias de adultos al día y la situación ha provocado que se habiliten siete anexos y múltiples pasillos que no son adecuados para garantizar la atención que un paciente de urgencias necesita. “Se está deshumanizando a los enfermos porque no hay sitio y los profesionales les tienen que colocar de mala manera en los pasillos”, añade el representante de los trabajadores del Gregorio Marañón.
La Consejería de Sanidad replica que, este año, el Plan de Invierno de la región ha incrementado los contratos de sanitarios en un 13% respecto a 2022. A pesar de ello, desde el Gregorio Marañón denuncian que es “totalmente insuficiente para dar respuesta al pico de demanda”. “El problema es que esas contrataciones que se han hecho se utilizan para cubrir las carencias estructurales de personal que tiene el hospital durante todo el año”, apunta Ramírez.
En el Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares desde hace más de una semana se ha abierto Marina, un anexo que al que hacen traslados cuando los pacientes de ingreso se acumulan. La dirección del hospital valora también abrir la sexta planta para paliar el problema de espacio en urgencias. Sin embargo, el departamento de prensa del centro ha insistido a este medio que “las urgencias están funcionando con normalidad”. “Si no fuese por necesidad, nadie se plantea abrir esa planta con el coste económico que eso conlleva”, asegura Ainara López, de la sección sindical de CC OO de este hospital.
Al sur de Madrid, en Leganés, las urgencias del Hospital Severo Ochoa han subido de forma notable desde el lunes. “El personal está desbordado, pero se han acostumbrado a que sea así cada año por estas fechas”, explican desde la sección sindical de CCOO del centro. En este momento, el hospital tiene 39 pacientes en espera de ser ingresados y cuenta con cinco boxes extra de urgencias, uno de ellos está doblado. “Eso significa que donde debería una cama con un paciente, hay dos camas con dos personas”, indican desde el sindicato.
Por su parte, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha informado a EL PAÍS que la situación en estos hospitales se ha podido dar a causa de “picos puntuales en los servicios de urgencias y en franjas horarias concretas”, pero que “en ningún caso las urgencias madrileñas han colapsado”.
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