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Padres e institutos dicen “basta ya” y exigen medios y profesores para garantizar la educación en Madrid

La FAPA Giner de los Ríos y Adimad consideran “inaceptable” la situación en la que se encuentran los centros en medio de la pandemia a causa de la “incapacidad de gestión” del Gobierno regional

Instituto de Enseñanza Secundaria María Guerrero en Collado Villalba.
Instituto de Enseñanza Secundaria María Guerrero en Collado Villalba.

Se han quejado por separado y ahora, en conjunto. Los padres se unen a los directores y todos apuntan hacia la nefasta gestión de la Consejería de Educación de Madrid. Los responsables de la Asociación de Directores de Instituto (Adimad), que agrupa al 80% de los equipos directivos, y de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres (FAPA) Giner de los Ríos, la mayoritaria en la región, han publicado un comunicado conjunto en defensa de la educación pública, que consideran en peligro a causa de años de recortes, a los que este curso se suman los estragos del coronavirus, la falta de medios para hacerle frente y la “incapacidad de gestión” de sus responsables.

Carmen Morillas, presidenta de la FAPA, ha hablado con contundencia de “golpe encima de la mesa”, de un “hasta aquí hemos llegado”. “Todo el sector educativo quiere pedir a Educación que tome medidas urgentes para garantizar el buen funcionamiento de la escuela pública”, ha declarado, para anunciar que, "si no se aparcan las políticas partidistas y no se escucha la realidad de las aulas”, tomarán “todas las medidas” que estén en su mano, que no han concretado, en defensa del derecho a la educación y de la igualdad de oportunidades que debe de garantizar “para no dejar a nadie atrás”. “No vamos a consentir que los derechos de nuestros hijos e hijas sean vulnerados”, ha remachado.

Morillas ha exigido “contratación de profesionales sin más dilación", ya que a finales de octubre aún no se han incorporado los profesores necesarios para arrancar el curso, hay materias que no han empezado a impartirse y alumnos que no conocen a su tutor", algo “totalmente inadmisible”. Adimad calcula que sigue faltando el 8% del profesorado prometido, unos mil docentes. CC OO, por su parte, lo eleva al 10%, tanto en Secundaria como en Primaria. La presidenta de la FAPA, además, ha denunciado que la consejería “no está cubriendo las bajas que, solo como consecuencia del coronavirus, son de cuatro o cinco profesores diarios”. Como consecuencia, “se está produciendo una pérdida muy importante de horas lectivas, lo que supone un grave perjuicio” para los alumnos.

La FAPA ha reclamado cambios en un protocolo covid que llevan desde el inicio del curso criticando por “ineficaz”. “Se han habilitado nuevos teléfonos pero la atención se reduce a repetir el protocolo del que ya disponen los centros. Igual sucede con el correo electrónico, cuya respuesta tarda cinco o seis días”, como también ha apuntado el presidente de Adimad, Esteban Álvarez. Ambas entidades aseguran que “las familias comunican entre tres y cuatro contactos positivos al día pero el protocolo establece que en secundaria no hay contactos estrechos, por lo que no se están confinando aulas”. Tampoco se están haciendo PCR a los contactos directos. El consejero de Educación, Enrique Ossorio, celebró el lunes que ningún centro esté cerrado de los tres de infantil que hubo, así como que los datos de aulas y alumnos en cuarentena “van mejorando”. “Hay 29.000 alumnos en cuarentena”, frente a los 34.000 del 5 de octubre, y las aulas han bajado de 1.891 a 1.616.

La representante de los padres también ha denunciado problemas en las rutas escolares, con una ocupación del 100% y en las que “no se respeta ni los grupos burbuja, ni grupos estables, ni distancias”. Además, ha continuado, hay familias receptoras de la renta mínima a las que no se les está aplicando el precio reducido de comedores y faltan enfermeras en los centros. “De los 130 profesionales anunciados tan solo se han contratado a tres”, explican ambas entidades.

Morillas ha citado entre los principales problemas la semipresencialidad, régimen en el que se encuentran 350.000 alumnos de 3º y 4º de la ESO, Bachillerato y FP. “A diario, recibimos llamadas de padres desesperados por la semipresencialidad, que está agravando la brecha social. La atención educativa desaparece y se traduce en un simple volcado de deberes. No hay conectividad, no hay ordenadores, falta formación en competencias digitales... en resumen, falta previsión, planificación e inversión”, ha sentenciado la responsable de la FAPA, que acusa a la Administración de “dejación de funciones”.

Álvarez ha denunciado, por segunda vez en un mes, la “situación de todo punto inaceptable” en la que se encuentran los centros a causa de “una mala gestión”. Los institutos, ha reiterado Álvarez, “no están preparados” para la enseñanza semipresencial, ya que “no disponen de las inversiones en las infraestructuras de conectividad necesarias para dar clase online”, mientras que los equipos directivos están “agotados” de “la falta de todo y de tener que hacer frente a tantos problemas”, al tener que lidiar con su doble función educativa y sanitaria. “Basta ya, la educación pública, las familias, los chicos, nuestro trabajo, se merecen algo mejor que todo esto, Madrid no se merece esto”, ha lamentado Álvarez.

El representante de los directores se ha quejado de la brecha que se ahonda entre los centros concertados y privados y los públicos, a los que no se permitió acometer obras para prepararse para la pandemia y a los que no han llegado ni los 70.000 dispositivos prometidos ni las 6.000 cámaras. “Lo mismo nos los traen los Reyes Magos”, ha ironizado Morillas. “Se ha permitido la presencialidad del 100% en los grupos de 3º de la ESO a 2º de Bachillerato si guardan la distancia de 1,5 metros, pero en la mayoría de los centros públicos no hay espacio”, ha subrayado Álvarez. “Los alumnos de centros de titularidad no pública sí pueden recibir una enseñanza por completo presencial. Y en estas condiciones tenemos que mandar a los estudiantes a competir en la Evau”, se ha lamentado Álvarez. “Se están vulnerando los derechos del niño”, ha rematado Morillas.

La administración se defiende: no solo pasa en Madrid

El Gobierno regional se ha defendido de las críticas asegurando que “la histórica bajada de ratios, a 18 alumnos en Primaria y a 22 en Secundaria” conlleva una contratación de docentes “sin precedentes” para cubrir más de 7.500 nuevos grupos. “La dificultad para encontrar docentes en algunas especialidades y etapas educativas muy concretas no es una circunstancia que se dé exclusivamente en Madrid”, sostiene Educación. También ha asegurado que el retraso en la entrega de dispositivos se debe a la falta de stock. Ya cuentan con 750 ordenadores, cuya distribución se está priorizando en aquellas zonas con alumnos con mayores dificultades. A ellos hay que sumar otros 1.500, donados por la Fundación AGH de la familia Abelló.

Aun así, Educación ha insistido en que desde la próxima semana comenzarán a repartirse 25.000 ordenadores, que han costado 14 millones de euros. “Próximamente, se van a adquirir otros 15.000 hasta llegar a los 40.000 comprados con fondos del Gobierno regional. No ocurre lo mismo con los otros 30.000 dispositivos que se van a comprar mediante el Ministerio de Educación y FP y que no llegarán hasta primavera”. Educación afirma haber transferido antes de comenzar el curso 20 millones a los centros para, entre otras cosas, poder adquirir material, como ordenadores y cámaras, para garantizar las clases telemáticas. “A través de Madrid Digital está previsto el suministro de 1.500 teléfonos corporativos para directores de los centros, 2.500 ordenadores portátiles para los equipos directivos de los centros y 5.000 ordenadores de sobremesa para que los puedan utilizar los profesores”.

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