La Generalitat firma un préstamo con BEI de 490 millones para hacer 4.300 pisos públicos
Barcelona ha ejecutado casi la mitad de los 276 millones de los fondos europeos Next Generation y Collboni pide ampliarlos más allá de 2026
La Generalitat ha firmado un préstamo del Banco Europeo de Inversiones (BEI, especializado en inversiones a largo plazo) de 490 millones de euros para hacer vivienda pública de alquiler. El anuncio lo han hecho de manera conjunta el Instituto Catalán de Inversiones (ICF) y el BEI este lunes, y subrayan que los fondos darán para 4.300 pisos “asequibles y energéticamente eficientes en Cataluña”. La ciudad de Barcelona ya está construyendo hasta 31 promociones que suman 2.059 pisos públicos financiados en un 85% con fondos del BEI que el Ayuntamiento logró en los últimos dos mandatos.
El primer tramo del nuevo préstamo será de 163 millones y la inversión se realizará “gracias al apoyo del programa InvestEU para movilizar fondos públicos y privados en apoyo de las políticas públicas”, señala el comunicado de las dos entidades públicas. El calendario que se abre ahora prevé que los pisos estén listos en 2028, “para contribuir a paliar el déficit de vivienda de alquiler asequible y reducir los gastos de consumo”. Desde la Generalitat, la consejera de Territori, Ester Capella, ha detallado que la ubicación de las futuras promociones dependerá de las peticiones de los promotores, públicos o privados. La consejería destinará 55 millones de euros a bonificar el 1% de los intereses de los préstamos, ha añadido.
La presidenta del BEI, la ex ministra Nadia Calviño, ha intervenido a través de un vídeo en las jornadas organizadas por el Ayuntamiento de Barcelona sobre fondos europeos y ha anunciado la inversión junto con el ICF. “En los próximos meses esperamos invertir más en la construcción de viviendas sostenibles y asequibles, porque el acceso a la vivienda es una prioridad para el BEI”, ha asegurado.
Collboni pide que los fondos Next Generation continúen
Durante la jornada Ahora, Barcelona avanza con los fondos Next Generation, el alcalde Jaume Collboni ha puesto en valor lo que los fondos europeos suponen para la transformación de las ciudades, y ha puesto ejemplos como la vivienda o infraestructuras de movilidad sostenible. “Las ciudades somos el kilómetro cero de los fondos europeos”, ha dicho el jefe de Gobierno de una ciudad que ha recibido 276 millones de Fondos Next Generation. Del total, se ha ejecutado el 47% del importe de unas ayudas que se traducen en 90 proyectos materializados por 19 entidades (entre el propio Ayuntamiento y sus empresas municipales) de los que 18 están ya finalizados, ha precisado el gerente Albert Dalmau.
Entre los proyectos financiados con los fondos que las instituciones europeas habilitaron tras la pandemia de coronavirus figuran los “ejes verdes” peatonales del Eixample, reformas urbanas, carriles bici, mejoras en la movilidad en los barrios de montaña, autobuses de hidrógeno que no generan emisiones, o la ampliación de la red de puntos de recarga de vehículos eléctricos. Más allá de las infraestructuras, en materia social los fondos permitirán renovar o construir cinco guarderías, la ampliación de la residencia del parque del Guinardó, un equipamiento de emergencia para personas sin hogar, o fondos para rehabilitar 1.500 viviendas. Iniciativas para descentralizar el turismo, mejoras en la zona de baños del Fòrum, la recuperación del Rec Comptal o de rehabilitación de mercados son otros proyectos financiados con los fondos europeos en la ciudad.
Collboni ha aprovechado su intervención para pedir que haya nuevos fondos extraordinarios, tanto del Estado como de la Unión Europea, más allá de 2026, para poder llevar a cabo los grandes proyectos que Barcelona planea para el horizonte de 2035, como la nueva biblioteca provincial, el nuevo hospital Clínic, continuar con el desarrollo del 22@ en la parte norte de la avenida de la Diagonal, o bien con el desarrollo de la Zona Franca de Barcelona
El ministro de Turismo e Industria, Jordi Hereu, también presente en el inicio de la jornada, ha celebrado la “mancomunidad entre las ciudades y las instituciones europeos fruto de las lecciones aprendidas en la crisis de 2008, la pandemia”. “Europa necesita fortalecer el proyecto político europeo porque solo avanzando una Europa más federal podremos avanzar en una Europa más social y democrática”, ha dicho y ha aplaudido la “rendición de cuentas” del consistorio barcelonés en el gasto de los fondos recibidos.
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