_
_
_
_

Liberadas en Manresa y Mollet del Vallés seis víctimas de explotación sexual

La Guardia Civil, junto con la Policía Nacional, ha detenido a diez integrantes de un grupo criminal que trataba con seres humanos y traficaba con drogas

La Guardia Civil, con la Policía Nacional, ha liberado a seis mujeres en Manresa y Mollet del Vallès, en Barcelona, víctimas de explotación sexual.-EFE/Guardia Civil/Policía Nacional
La Guardia Civil, con la Policía Nacional, ha liberado a seis mujeres en Manresa y Mollet del Vallès, en Barcelona, víctimas de explotación sexual.-EFE/Guardia Civil/Policía NacionalGuardia Civil/Policía Nacional (EFE/Guardia Civil/Policía Nacional)

La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Nacional, ha liberado este martes a seis mujeres en Manresa y Mollet del Vallès, en Barcelona, víctimas de explotación sexual que vivían en condiciones de insalubridad. En la operación, denominada Joya-Aguyje, se han detenido a diez integrantes de este grupo criminal de trata de seres humanos. Además, en ambas viviendas, la organización criminal traficaba con sustancias estupefacientes, y obligaba a las víctimas a incentivar a los clientes para que compraran cocaína.

Entre los detenidos, se encuentran los líderes de la banda, un hombre y una mujer, quienes confinaban a las mujeres en dos pisos-prostíbulos de las citadas localidades. Los miembros del grupo criminal están acusados de los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros relativos a la prostitución, contra la salud pública, contra la integración moral y de pertenencia a organización criminal.

La organización criminal captaba a las víctimas en países de Sudamérica, principalmente Paraguay. Aunque también, otras mujeres fueron captadas ya en España. El modus operandi consistía en prometer mejorar sus condiciones de vida y de trabajo y, a través del engaño, conseguían aprovecharse de la vulnerabilidad de las víctimas.

La banda pagaba todos los gastos y se hacía cargo de los trámites necesarios para que las mujeres pudieran entrar en España y, una vez aquí, eran trasladadas a estos dos pisos-prostíbulos, donde eran obligadas a estar disponibles las 24 horas del día. Les retiraban sus teléfonos y los pasaportes y les obligaban a estar encerradas en ambas viviendas, sin privacidad y en condiciones insalubres. Incluso en una de esas viviendas, les controlaban con cámaras de videovigilancia.

Además, la organización criminal traficaba en los dos pisos con sustancias estupefacientes, y obligaban a las víctimas a incentivar a los clientes para que compraran cocaína. También, eran sometidas a violencia física si el cliente lo requería e, incluso, les grababan.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Durante la operación, la policía ha intervenido más de 13.000 euros en efectivo, 18 teléfonos móviles, un ordenador, 300 gramos de cocaína, una prensa hidráulica empleada en la elaboración de sustancia estupefaciente y numerosa documentación relacionada con la explotación de las víctimas.

Asimismo, la investigación dirigida por el juzgado de Instrucción número 3 de Manresa y llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Bizkaia y la Unidad Central de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales de la Policía Nacional de Barcelona, ha bloqueado 11 productos bancarios, tres vehículos y un inmueble.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_