Estabilizado el incendio de Portbou tras quemar 573 hectáreas

Los bomberos han dado por estabilizado el incendio que quema desde el viernes en Portbou y Colera pasadas las nueve y media de la noche de este sábado, después de que por la tarde haya permitido la actuación de cuatro Aviones de Vigilancia y Ataque (AVA) de la Generalitat y del Ministerio de Transición Ecológica. La acción coordinada ha permitido la descarga de unos 3.000 litros de agua y retardante en cada pasada de avión y ha sido clave para desactivar los frentes activos del fuego, a la espera de que se pueda controlar por completo y apagar. El consejero catalán de Interior, Joan Ignasi Elena, ha destacado unas horas antes de la estabilización que la intervención de esas unidades aéreas “ha ayudado y facilitado mucho las cosas”.

El fuego, que se declaró la tarde del viernes en una pista forestal entre Portbou y el pantano de la localidad, a la altura del Mas del Molí, ha arrasado hasta la tarde-noche del sábado 573 hectáreas de zona forestal, la mayoría de ellas en la localidad vecina de Colera. El fuerte viento de tramontana que sopla en la zona dificulta las tareas de extinción. Las poblaciones de Portbou y Colera y tres urbanizaciones de Llançà han estado confinadas desde el viernes hasta las 19.30 horas del sábado. También a esa hora se han levantado parcialmente las restricciones en la carretera N-260, que une España con Francia y que estuvo cortada en Llançà, así como el servicio ferroviario entre Figueres y la frontera francesa. Unas 270 personas que estaban de paso por las tres localidades afectadas tuvieron que ser alojadas en locales municipales. Además, 4.000 abonados han permanecido unas horas sin electricidad debido a la afectación de una línea de media tensión. En Portbou, sin agua potable ni internet, la situación se ha agravado y ha sido necesaria la ayuda de camiones cisterna.

Durante toda la jornada han estado trabajando en las tareas de extinción unos 280 bomberos de la Generalitat, 5 helicópteros bombarderos y 2 de coordinación y a media tarde, con el descenso de la tramontana, se ha logrado que por primera vez desde la declaración del incendio pudieran efectuar descargas de agua los AVA.

Sobre las causas del incendio, el Inspector jefe de los Agentes Rurales, Josep Antoni Mur, ha explicado que el viernes por la tarde ubicaron el punto exacto donde se inició y se empezó a intentar determinar la causa. “Podemos apuntar que no ha sido por causas naturales, ni eléctricas, a partir de aquí cualquier causa que pueda estar relacionada con la actividad humana está abierta; es una zona que tiene una cierta frecuentación y tiene una cierta circulación de personas, pero no podemos concretar más”, ha sostenido Mur.

El jefe de Intervención de los Bomberos de Girona, Jordi Martín, detalló que se han centrado en dos aspectos, la protección de la población, “porque el incendio estaba activo llegando a las casas de Cala Rovellada en Colera y en Portbou entre la estación y las primeras casas del sur”, y en atacar el flanco derecho, “que es el que nos preocupa más porque su apertura haría crecer el incendio no solo en superficie, con unas 2.700 hectáreas, sino también con posible afectación en la población, en urbanizaciones al norte de Llançà.

Los efectivos de emergencias, que vieron dificultadas las labores de extinción por el fuerte viento que creó decenas de focos secundarios alejados de las llamas principales, aprovecharon la bajada de intensidad para potenciar los medios aéreos. “Nos hemos despertado con rachas de unos 100 kilómetros por hora y la tarde de este sábado hemos aprovechado que hemos estado a 30-40km/h por horas para potenciar los medios aéreos, ya que va a aumentar por la noche y llegaran a su máximo la noche del domingo al lunes”, explico Martín. Por su parte, el director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos, Joan Delort, ha explicado que se había estado en coordinación permanente con el Ministerio, y que se les había pedido medios aéreos, por si las circunstancias permitían su actuación.

Martín se ha mostrado “satisfecho” del trabajo hecho el sábado y ha destacado que se había empezado el día con con un perímetro descontrolado en gran parte. “La evolución de las tareas desarrolladas este sábado han sido favorables y podemos tener unas condiciones buenas para entrar en fase de estabilización. A lo largo de la tarde pudimos hacer no solo que el perímetro estuviera frío, sino asegurado, con descargas de retardantes”. Además, ha destacado que las aperturas de carreteras se harían con restricciones de movilidad de Llançà a la frontera y también en el perímetro del incendio, y que se alargarían hasta que “en los próximos días pueda pasar a controlado y extinguido”.

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