Los catalanes vuelven a suspender al Govern, según una encuesta del CIS catalán

El Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat (CEO) ha presentado este jueves un informe que arroja que la mayoría de ciudadanos suspenden la gestión del Govern con una nota media de un 4,4. La valoración que realizan del Gobierno Central es aún peor: un 4. Esta es la quinta vez consecutiva que los catalanes suspenden al Ejecutivo catalán. El informe tiene la particularidad de que ha estrenado una nueva metodología: unas 20.000 personas, elegidas de forma aleatoria, recibieron cartas para una una encuesta autoadministrada y contestaron 5.468: 4.311 vía online y 1.157 en papel.

El último informe sobre políticas públicas de 2022 concluyó que los encuestados suspendían al Govern con un 4,8. Jordi Muñoz, director del CEO, ha planteado que no se puede establecer una comparación de los resultados de los dos estudios porque este sondeo se ha elaborado de forma autoadministrada sobre un universo de personas mayores de 16 años censadas en Cataluña, con independencia de su nacionalidad y seleccionada de forma aleatoria. La de hace un año, se hizo sobre personas mayores de edad, de nacionalidad española y con cuotas. “Son instrumentos diferentes”, ha alegado Muñoz, que ha puntualizado que tampoco está afirmando que la valoración del Govern haya mejorado respecto al último barómetro del año pasado cuando recibió una nota de 3,5.

La encuesta, que tendrá dentro de dos semanas una segunda parte con contenido sociopolítico, está dividida en tres bloques: la valoración del Ejecutivo catalán, la de Administración y los servicios públicos y la política de impuestos. Los simpatizantes de ERC son los únicos que aprueban la gestión del Gobierno con un 5,4. Los de Junts les puntúan con un 4,8 y los del PSC, con un 4,7. La situación es inversa cuando se aborda la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez: los simpatizantes socialistas y de los comunes con un 5,8 y un 5,2. Los de ERC, con un 3,9, valoran peor al Gobierno que los de Ciudadanos, con un 4,2.

El estudio recoge la posición de los encuestados sobre los impuestos. La mayoría (un 50%) es partidario de mantenerlos para disponer de los mismos servicios públicos y un 32% es partidario de subirlos para mejorarlos. Solo un 12% los bajaría. Más de la mitad de los simpatizantes de la CUP y los comunes subirían los impuestos. La mayoría de los encuestados optarían por mantener el IRPF y el IVA mientras son partidarios de subir el de sociedades y de patrimonio. El 56% es partidario de bajar el impuesto de sucesiones. Paralelamente, el 64% cree que se pueden bajar los impuestos sin que afecten a los servicios públicos.

El informe vuelve a recoger la impresión que tienen los consultados sobre el transporte público: los usuarios puntúan con un 7,8 los trenes de larga distancia, un 7,6 los de los Ferrocarriles de la Generalitat y un 5,8 los de Rodalies. El documento invita a los encuestados a decir en qué invertiría la cantidad de 1000 euros públicos si estuviera en sus manos: la media dedicaría 277 euros a sanidad, 207 a educación; 149 a ayudas y prestaciones, y 100 al transporte público e infraestructuras.

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