Ábalos acepta declarar el jueves en el Supremo tras intentar aplazar su interrogatorio
El exministro ha reculado después de que el magistrado Puente retirase su ofrecimiento para que compareciese voluntariamente como imputado por su vinculación con la trama de Aldama
José Luis Ábalos, exministro del Gobierno de Pedro Sánchez, ha perdido su pequeño tira y afloja con el juez Leopoldo Puente, que investiga en el Tribunal Supremo la relación del político con la supuesta trama liderada por el empresario Víctor de Aldama —esta red corrupta anidó en la Administración durante la etapa del ex secretario de Organización del PSOE como responsable de la cartera de Transportes—. En apenas unas horas, el exdirigente socialista ha reculado y ha aceptado comparecer finalmente este jueves como imputado y de forma voluntaria ante el alto tribunal, después de que Puente optase por anular su interrogatorio, tras rechazar posponerlo como el propio Ábalos había pedido. Con la negativa al aplazamiento, el magistrado había abierto la puerta a dirigirse ya al Congreso mediante un suplicatorio para pedir a los parlamentarios que le dieran luz verde para imputar formalmente al diputado, actualmente en el Grupo Mixto.
Los hechos se han sucedido en apenas unas horas. Sobre las 12.00 de este lunes, el magistrado Leopoldo Puente comunicó que anulaba la declaración de Ábalos prevista para este jueves. El juez anunció que “dejaba sin efecto” la proposición que hizo la pasada semana al socialista para que pudiera comparecer de forma voluntaria antes de decidir si presentaba una petición de suplicatorio al Congreso para poder encausarlo formalmente. El instructor optó por esa fórmula (prevista por la ley) a raíz de que Ábalos expresase varias veces en público que quería explicarse en el seno de las pesquisas. Sin embargo, tras darle dicha opción, su defensa presentó un escrito para avanzar que no se negaba a declarar, pero que quería hacerlo más adelante.
Ese movimiento del exministro no era inocuo. La pasada semana, Leopoldo Puente imprimió velocidad a la parte del caso Koldo que ha recalado en el alto tribunal, rebautizada por los medios como caso Ábalos —esta parte se centra en el exdirigente del PSOE, único aforado por su condición de diputado—. Además de fijar la comparecencia del ex secretario de Organización socialista para este jueves 12 de diciembre, el magistrado ordenó celebrar otros dos interrogatorios a la semana siguiente: el del empresario Víctor de Aldama (16 de diciembre) y el de Koldo García, exayudante de Ábalos en el ministerio (17 de diciembre). El calendario previsto hacía difícil que, de posponerse el testimonio del exministro, se pudiese mantener el resto si se quería seguir con el mismo orden y los mismos tempos.
La defensa de Ábalos había alegado que, debido a un problema informático, no había podido acceder al sumario y, por tanto, no iba a tener tiempo suficiente para estudiar toda la causa para este jueves. Por ello, a finales de la pasada semana, reclamó posponer la cita. Pero, este mediodía, el juez no aceptaba esa posibilidad. Según explicaba en su resolución, al aforado le corresponde la decisión de acudir o no al tribunal en una declaración voluntaria, pero ello no significa “que pueda hacerlo en el momento que considere más oportuno, determinando, también libérrimamente, el tempo de las actuaciones”.
Puente incidía en que sus decisiones no deben estar condicionadas a que el político “considere llegado el momento oportuno para prestar su declaración voluntaria”. “Ello no solo daría pábulo al surgimiento de eventuales dilaciones indebidas, sino que podría perjudicar también seriamente la eficacia de la investigación”, subrayaba el juez.
El magistrado del Supremo aceptaba que la petición de Ábalos era “plenamente legítima”, pero le dejaba caer varios reproches. “Dispone de copia de la totalidad de lo actuado”, afirmaba el juez, que remachaba: “Y es razonable considerar que viene conociendo a través de los medios de comunicación, como casi cualquier otro ciudadano español, el trazo grueso de los hechos que se le atribuyen, también descritos sucintamente en el auto de [la pasada semana]”. Es más, Puente sostenía que, al igual que ahora había pedido aplazar su declaración voluntaria, el exministro podría volver a hacerlo en el futuro, lo que “perturbaría el buen orden del proceso”. “Provocando, a su discreción, dilaciones que [no solo] habrían de reputarse indebidas, sino que podrían también perturbar el buen fin y la eficacia de la investigación”, apuntaba.
Pero finalmente, tras conocerse la decisión de Leopoldo Puente de anular directamente la declaración voluntaria de Ábalos y dejar más cerca la petición de un suplicatorio, la defensa del exministro ha aceptado la fecha propuesta inicialmente. A través de un escrito, el abogado del diputado se lo ha comunicado al Supremo. Y el magistrado, a continuación, ha vuelto a programar el interrogatorio para las 10.00 de este jueves.
Contra el PSOE
Mientras tanto, otra batalla se gesta en el seno del sumario. Varias acusaciones populares han reclamado que se rechace la posibilidad de que el PSOE se persone como acusación en la investigación, como ha aceptado el juez Ismael Moreno en la parte del caso que sigue en la Audiencia Nacional. El grupo ultracatólico Hazte Oír ha manifestado su oposición al considerar que el movimiento de los socialistas busca “entorpecer” las pesquisas, pues el partido “puede verse directamente implicado”. La asociación Liberum también lo considera improcedente: “El detonante del interés en su personación ha sido la declaración voluntaria de Aldama en esta sede judicial con mención expresa de las tres personas pertenecientes a la máxima esfera del PSOE”.
Además, la Audiencia Nacional acogerá este martes una reunión de las acusaciones populares organizada por el juez Ismael Moreno, que quiere escucharlas antes de decidir qué hacer ante el elevado número que se ha personado en la causa. El magistrado tiene sobre la mesa la posibilidad de agruparlas bajo una única dirección letrada. Ante ello, por ejemplo, Liberum planteará que se aglutinen en dos grupos: uno con todos los partidos políticos y sindicatos, y otro con las diferentes asociaciones de carácter civil.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.