Sánchez y Feijóo agravan su choque en una reunión llena de reproches mutuos

El enfrentamiento entre el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se agrava tras la reunión que ambos han mantenido este lunes, de poco menos de una hora, como parte de la ronda de consultas del líder socialista para su investidura. El desacuerdo ha sido la consigna en un encuentro que, como ya sucedió en el que mantuvieron a finales de agosto con motivo de la investidura fallida de Feijóo, se ha convertido en un nuevo cruce de reproches. Sánchez ha pedido a Feijóo “contención en su intento desesperado de agitar la calle” tras las dos protestas contra la amnistía que los populares han protagonizado en las últimas semanas, y le ha acusado de intentar “una instrumentalización partidista de la Fiesta Nacional del 12 de octubre”. Mientras, Feijóo ha instado al líder socialista a convocar de nuevo elecciones para “consultar a los españoles” por esa medida de gracia que ha tachado de “involución democrática” y que ha anunciado que recurrirá al Tribunal Constitucional.

El encuentro ha sido tenso y ha vuelto a poner de manifiesto que no hay ninguna posibilidad de acuerdo sobre ningún asunto entre los dos grandes partidos. A diferencia de lo que hizo Feijóo cuando fue candidato, Sánchez ni siquiera le ha pedido apoyo para su investidura. “Tampoco vamos a apelar al transfuguismo como hicieron ellos”, ha apostillado Patxi López, el portavoz socialista en el Congreso. La previsión es que sea quien comparezca por parte del PSOE tras las reuniones que Sánchez mantendrá durante la semana con todos los grupos parlamentarios salvo con Vox.

“Me habría gustado que esta reunión hubiera servido para algo”, ha afirmado el líder del PP en el Congreso tras el encuentro con el presidente en funciones. “Durante estos 50 minutos de reunión, la respuesta ha sido la nada. No me ha contestado a nada”, se ha quejado Feijóo, que asegura que Sánchez no le ha dado ninguna explicación sobre lo que está negociando con los partidos independentistas, y si eso incluye una ley de amnistía. A pesar de ello, Feijóo da por hecho que la norma se aprobará y que, por tanto, el líder socialista cometerá “un fraude electoral masivo” porque no había incluido esta medida en su programa electoral para las pasadas elecciones. “Le dije que no lo hiciera. Que era una equivocación histórica”, ha asegurado Feijóo. “Le he pedido honestidad. Que se llame a las cosas por su nombre, que vaya de cara y pregunte a los españoles lo que en ningún momento se les ha preguntado. Que lo consulte a los españoles en unas elecciones”, ha instado al secretario general del PSOE. Los socialistas siguen sin entrar al detalle. “Yo no sé si va a haber ley de amnistía, lo que sí sé es que este Gobierno va a seguir por la misma senda que le ha traído hasta aquí: la política de distensión, de diálogo, para reforzar la convivencia y no buscar la fractura. Y hemos demostrado que funciona”, ha dicho López.

Sánchez y Feijóo se han enzarzado también por las manifestaciones en la calle en las que el PP ha participado en las últimas semanas contra la amnistía. El PSOE pide al PP “prudencia en sus actuaciones y respeto al proceso de investidura encargado por Su Majestad el Rey” y que, por tanto, deje de agitar las calles. “El PSOE fue absolutamente respetuoso en el proceso de investidura de Feijoo, a pesar de que hubiera hecho perder el tiempo a todos los españoles durante más de un mes. Sin embargo, en las dos últimas semanas el PP ha convocado dos manifestaciones contra la investidura de Pedro Sánchez, en las que se ha faltado al respeto al Jefe del Estado, y ahora está intentando hacer una instrumentalización partidista de la Fiesta Nacional del 12 de octubre”, se han quejado los socialistas en un comunicado poco después de que terminara la reunión. Y el portavoz socialista ha añadido después: “Pedimos respeto a la institucionalidad de nuestro país, empezando por el jefe del Estado, al que respetan cuando les conviene, cuando designa candidato a Feijóo, pero no respetan tanto cuando el designado es un candidato socialista. Ayer vimos algo lamentable en la manifestación de Cataluña que significa justo lo contrario al respeto”.

Feijóo, muy molesto por esta queja del PSOE, sostiene que su partido no ha convocado ninguna manifestación, porque la primera fue un mitin de partido y la de este domingo la convocó Sociedad Civil Catalana, y avisa de que el PP seguirá saliendo a la calle si así lo considera. “Por supuesto que el PP no renuncia en ningún caso a hacer mítines y protestas. ¿En qué país democrático estamos?”. “Tanto el mitin del PP como la manifestación [en Barcelona] tenían un objetivo: ir en contra de Sánchez y en contra del Gobierno que queremos poner en marcha. Lo hacen agitando la calle y señalándonos como enemigo. El PP va de constitucionalista, de partido con visión de país, y no tiene ninguna de esas cosas y lo ha demostrado siempre que no tiene el poder. Cada vez que la derecha no está en el poder, hay actuaciones que son casi antisistema”, ha cargado López.

Uno de los momentos más tensos de la reunión ha sido cuando Sánchez ha pedido a Feijóo que el PP no instrumentalice la Fiesta Nacional del próximo 12 de octubre. “¿En serio me estás diciendo que nosotros estamos instigando los pitidos del 12 de octubre? ¿De verdad?”, le ha contestado el líder del PP al del PSOE, según fuentes de la dirección popular. Los populares recuerdan que Sánchez ha recibido pitadas ya en fiestas nacionales de otros años cuando Feijóo ni siquiera era líder del PP, y se preguntan con ironía si entonces también los instigaba Feijóo “desde Galicia”.

Sánchez y Feijóo también han abordado, muy brevemente, el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial, pendiente desde hace casi cinco años, para constatar de nuevo que, al menos a corto plazo, no es posible un acuerdo. El único asunto en que han profundizado algo más ha sido en el ataque de Hamás a Israel, unos hechos que también ha utilizado Feijóo para cuestionar la actuación “de buena parte de los socios del Gobierno, incluido la coalición de Sumar”, a los que ha acusado de ser “equidistantes en relación con esta oleada de violencia”.