Canarias reclama ayuda ante el repunte en la llegada de cayucos de agosto

El sol cae inclementemente sobre una pequeña plaza en los alrededores del campamento de acogida Canarias 50, en el barrio de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria. Sentados en el respaldo de un banco, un pequeño grupo de senegaleses deja pasar las horas a la sombra de unos flamboyanes. “Llegamos hace varias semanas a otra isla”, explica uno de ellos, que prefiere no dar su nombre. “Esperamos... En casa no había nada que hacer, de todos modos”.

Este grupo constituye un pequeño ejemplo de la llegada a las islas de personas a bordo de cayucos y otras embarcaciones, fenómeno que ha puesto en alerta a sus responsables políticos en estas primeras semanas de legislatura y ha llegado a provocar las primeras fricciones entre los gobiernos central y autonómico. En agosto llegaron a las islas casi tres veces más que en el mismo mes del año pasado. “Necesitamos un refuerzo que garantice la primera acogida que se presta en las islas”, ha afirmado este jueves a este respecto la consejera de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias del Ejecutivo, Candelaria Delgado. “Somos una tierra solidaria, una tierra de acogida”, aseguraba este domingo por su parte en su perfil de X (antigua Twitter) el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, “una tierra que sabe perfectamente lo que es tener que coger la maleta y buscar un futuro mejor para ti y para tus hijos”. Por eso, el presidente ha hecho especial hincapié también en reivindicar la necesidad de tener más recursos para poder atender de manera digna “a todos aquellos que están llegando a nuestras costas”.

Dos nuevos rescates a última del domingo elevaron a 1.173 las llegadas de inmigrantes a Canarias durante el fin de semana, la cifra más alta en 48 horas desde noviembre de 2020, y esta madrugada Salvamento Marítimo ha prestado ayuda a otras 92 personas localizadas al este de Lanzarote. La llegada de migrantes por barco a las islas cayó el 11,3% hasta 8.508 personas en los siete primeros meses del año, según los datos del Ministerio del Interior. Los últimos meses, sin embargo, están mostrando un cierto cambio de tendencia, provocado tanto por una meteorología favorable como, sobre todo, la crisis política y social que vive Senegal y buena parte del Sahel. Tras dos años de inestabilidad, la crisis política del país explotó el 1 de junio con la condena a dos años de cárcel del líder opositor Ousmane Sonko, muy popular entre los jóvenes.

El resultado, la reactivación de las salidas de cayucos, que han reactivado también las estadísticas. En agosto, arribaron a las islas 2.931 personas, lo que ha llevado al acumulado de llegadas a 11.439 personas, 802 más que un año antes (el 7,5% más). El pasado lunes, Canarias recibió la mayor cifra de llegadas de inmigrantes en una sola jornada en lo que va de año, 634 personas en seis embarcaciones que arribaron a Tenerife, Gran Canaria y El Hierro, de las que 126 son menores, según un recuento de Efe. Si se cumplen las previsiones de los equipos de emergencia y de Salvamento Marítimo, el trasiego se va a intensificar en las semanas venideras, cuando suelen mejorar las condiciones de navegación. Este fin de semana han arribado a las islas 1.136 migrantes a bordo de 16 embarcaciones irregulares.

La situación resulta especialmente preocupante en lo que se refiere a los menores no acompañados. Candelaria Delgado ha explicado que los niños tutelados en Canarias ascienden en la actualidad a 2.400, aproximadamente un 32% más que hace un año. “Las islas no pueden hacer frente a la situación solo con los seis millones asignados”, ha sentenciado la consejera en referencia al dinero que el Ejecutivo central aprobó en Consejo de Ministros en septiembre de 2022 para la atención de menores extranjeros no acompañados.

Por ello, aspira a cerrar tanto un nuevo convenio con Migraciones como lograr que el Ministerio de Igualdad reparta entre Ceuta, Melilla y Canarias los cerca de 35 millones previstos para financiar el fallido reparto de entre 800 y 900 menores con otras comunidades. “Y si no hay ese reparto solidario”, añadió, “igual hay que llevar a cabo algún tipo de legislación estatal que así lo establezca”.

Quejas de los cabildos

Las llegadas registradas en esta última parte del año han llevado, además, a los siete cabildos de Canarias convocar una asamblea extraordinaria el miércoles a la que asistieron, entre otros, el propio presidente Fernando Clavijo y la consejera Delgado. A su término, las corporaciones insulares exigieron a la administración central “medidas urgentes ante la crisis migratoria”. El presidente del Cabildo de La Gomera y presidente de turno de la Federación Canaria de Islas (Fecai), Casimiro Curbelo, reclamó además la “solidaridad” del resto de comunidades autónomas en la acogida de menores no acompañados a raíz de la “falta de planificación desde el Estado”.

Un día antes de participar en la asamblea de la Fecai, Clavijo y Delgado viajaron a Madrid con un punto destacado en la agenda: mantener una reunión con el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. El encuentro se saldó de forma positiva para el líder nacionalista. “Parece que por fin alguien en el Gobierno es consciente de la dimensión del problema y comparte con nosotros la necesidad de planificación para abordar lo que previsiblemente va a ocurrir, aseguró Clavijo a los medios a su término. El presidente anunció que el ministro le había explicado que se va a levantar un recurso de acogida con 300 plazas en la isla de El Hierro, instalar módulos en Gran Canaria, en el cuartel de Las Canteras en Tenerife y en El Matorral en Fuerteventura. Fuentes del Ministerio de Migraciones detallaron este jueves a EL PAÍS que la ocupación de los recursos en las islas está en el entorno del 60%, frente al 50% aproximado de principios de agosto.

La situación ha llevado a la Fiscalía General del Estado a reclamar este jueves que estos recursos tengan un carácter permanente. En opinión de ministerio, la cercanía a las costas africanas provoca una “constante” presión migratoria sobre Canarias, agravada en los tres últimos años, según señala la Fiscalía General del Estado, que advierte de que la respuesta a esos flujos no debe improvisarse, por lo que pide instalaciones permanentes para acoger dignamente a los migrantes.

En su Memoria relativa al 2022, el ministerio público considera que deberían de existir “instalaciones permanentes” para garantizar una acogida inmediata “en condiciones de dignidad” y no lugares preparados de acuerdo a las necesidades existentes en cada momento “y, por tanto, sujetos a la improvisación”. El objetivo, aseveró, pasa por evitar “indeseables” situaciones como la del muelle de Arguineguín en 2020, donde llegaron a hacinarse más de 2.500 migrantes.