El Gobierno entierra en público su crisis interna por el envío de armas a Ucrania
“Hice lo que tenía que hacer y hemos pasado página”, afirma la vicepresidenta Yolanda Díaz
El Gobierno de coalición se esforzó este martes por enterrar la crisis abierta entre los socios por el envío de armamento a la resistencia ucrania. Después de que el lunes PSOE y Podemos buscaran rebajar la tensión desatada tras el rechazo de la formación que dirige la ministra Ione Belarra, este 8-M, una fecha particularmente simbólica, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quiso zanjar el debate dentro del Ejecutivo. “Hice lo que tenía que hacer y hemos pasado página”, declaró a su llegada a la sesión de control al Gobierno en el Senado. Las discrepancias internas respecto al envío se mantienen —también entre los ministros de Unidas Podemos—, pero el partido fundado por Pablo Iglesias expresó el lunes por primera vez su respaldo al presidente y este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la titular de Igualdad, Irene Montero, evitó referirse al asunto.
La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, defendió en La Moncloa el cambio de postura del Gobierno, que apostaba primero por el envío de armas a través de la Unión Europea, y el miércoles pasado anunció que se decantaba también por la entrega directa. “Hubo un cambio relevante en el seno de la UE para que el pueblo ucranio tuviera capacidad de respuesta a la agresión. Y está nuestro compromiso de dotarlos de forma bilateral a la vista de la evolución de los acontecimientos. Reiteramos lo importante: no es un asunto doméstico, no es una cuestión menor, estamos ante un cambio de paradigma y tenemos que tener alturas de miras”, pidió Rodríguez.
Sobre el silencio de Montero al ser preguntada por las diferencias dentro del Gobierno, fuentes del partido argumentan que en las comparecencias posteriores al Consejo de Ministros no se abordan temas que tengan que ver con el posicionamiento y opinión de cada formación política. Desde Podemos aseguran que la comunicación con el PSOE es siempre “fluida”, aunque el choque de los últimos días ha evidenciado la complicada convivencia entre las dos formaciones, así como las diferencias dentro de su propio grupo, ya que tanto Díaz como los ministros Alberto Garzón y Joan Subirats cerraron filas con el presidente. “Seguimos pensando diferente sobre el envío de armas, pero tenemos muy clara nuestra posición institucional”, apuntan. “Sánchez sabe que en estos momentos difíciles puede contar con Podemos”, había declarado el lunes la portavoz Isa Serra, quien matizó que la alusión de Belarra el domingo a “los partidos de la guerra” no se refería al PSOE. La rectificación llegaba después de varias conversaciones para tratar de aplacar la pelea dentro del Ejecutivo, tras un discurso muy duro de la secretaria general de Podemos que fue acogido con malestar por los socialistas. Hubo un primer contacto entre Belarra y Díaz el domingo, y ya el lunes, conversaciones entre Montero y el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, por un lado, y la vicepresidenta segunda y Sánchez, por el otro, para cerrar la crisis.
El propio presidente, de visita a la misión de la OTAN en Letonia este martes, quiso minimizar las discrepancias, señaló que el partido había matizado sus afirmaciones y reconoció haber hablado tanto con Díaz como con Montero el día antes. La tregua en la coalición se escenificó con la participación del presidente en el acto institucional por el 8-M celebrado el lunes por la tarde.
“El Gobierno de España sigue trabajando para paliar las previsibles consecuencias que la guerra de Putin puede tener en nuestro país. Estamos concentrados en proteger a los trabajadores, a las familias y a las empresas. Esto es lo que nos une”, recalcó la vicepresidenta ante los medios en el Senado, donde todos los partidos suscribieron una declaración institucional para rechazar la “agresión militar” contra Ucrania.
“Hemos pasado página”, destacó Díaz, sin especificar si se refería a la crisis dentro de UP o al conflicto con el PSOE. La titular de Trabajo reunió el lunes a los ministros y secretarios de Estado del grupo para aplacar las tensiones. “Yolanda y muchos compañeros no entendieron cuando Unidas Podemos llegó a la negociación con el PSOE para que hubiera Gobierno”, reprochó en la Cadena SER horas después del encuentro el exvicepresidente Iglesias. “Yolanda Díaz es miembro del Gobierno de España porque Podemos mantuvo esa posición, igual que Alberto Garzón”, insistió. El 8-M, sin embargo, nadie se salió del guion.
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