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Cronología del diálogo sobre Cataluña

El Gobierno central y la Generalitat recuperan la mesa política después de un año en pausa por la pandemia

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Palau de la Generalitat, en Barcelona, antes de participar en la mesa de diálogo sobre Cataluña este miércoles.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Palau de la Generalitat, en Barcelona, antes de participar en la mesa de diálogo sobre Cataluña este miércoles.Quique García (EFE)
El País

Tras un año y medio de parón por la pandemia, la segunda sesión de la mesa de diálogo entre el Ejecutivo central y la Generalitat catalana llega en un clima de doble tensión. Por un lado, la paralización de la ampliación del aeropuerto de El Prat, con una inversión prevista de 1.700 millones de euros, ha provocado un gran malestar en el Govern, a pesar de que fueron los recelos de la Generalitat a ese plan los que desembocaron en la retirada del mismo. El president Pere Aragonès ha llegado a acusar de “chantaje” al Gobierno central. Sin embargo, es entre los propios socios del Govern, ERC y Junts, donde la hostilidad es más patente. Las continuas diferencias sobre la forma de abordar la negociación con el Estado sumaron un último episodio este mismo martes con motivo de la composición de la mesa. La propuesta de Junts incluía a los indultados por el juicio del procés Jordi Turull y Jordi Sánchez, ajenos al Gobierno autonómico, y se encontró con el rechazo total de ERC, que finalmente ha acudido solo al encuentro ante la negativa de Junts a recular.

La mesa se celebra así en un ambiente de irritación y desconfianza que enfría el acercamiento entre los dos Gobiernos que supuso la concesión de los indultos a los presos independentistas del procés el pasado junio. A pesar de todo y como en la anterior ocasión, la mesa contará con los jefes de los respectivos Ejecutivos, Pedro Sánchez y Pere Aragonès, que no quieren dejarla caer. Lo que sigue es un resumen de los pasos dados hasta ahora:

La reunión de Pedralbes. En diciembre de 2018, el entonces presidente la Generalitat, Quim Torra, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunieron en el Palacio de Pedralbes, en Barcelona, y pactaron “potenciar los espacios de diálogo”, a pesar de mantener “diferencias notables sobre el origen, naturaleza y vías de solución” del conflicto en Cataluña después del procés. Paralelamente, Carmen Calvo y Meritxel Batet, todavía vicepresidenta y ministra respectivamente, se reunían con Pere Aragonès y Elsa Artadi, por aquel entonces vicepresidente de la Generalitat y consellera de Presidencia. Al término de aquella cita, Torra entregó a Sánchez un documento con 21 reclamaciones soberanistas, incluido el derecho de autodeterminación para Cataluña. El presidente del Gobierno no respondió a aquel documento. Sánchez siempre ha descartado negociar la autodeterminación.

La primera mesa con Torra. La primera reunión formal de la llamada mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat, a la que asistieron de nuevo Sánchez y Torra, se celebró en Madrid el 26 de febrero de 2020. En la delegación del Ejecutivo central había siete ministros; la delegación catalana, además de por el president y el entonces vicepresidente, Pere Aragonès, estaba formada por dos consejeros del Govern (Jordi Puigneró, de Junts, y Alfred Bosch, de ERC), tres diputados (Elsa Artadi, de Junts, y Marta Vilalta y Josep María Jové, de ERC), y el exjefe de gabinete de Torra y del expresidente Carles Puigdemont, Josep Rius. Los pactos fueron básicamente dos: que cualquier acuerdo que se pudiera alcanzar estaría “en el marco de la seguridad jurídica” y que se reunirían -ya sin presidentes- cada mes. Algo que nunca ocurrió por el estallido de la pandemia. La parte catalana volvió a plantear la amnistía y el derecho a la autodeterminación, sin obtener respuesta del Ejecutivo de Sánchez.

Las elecciones en Cataluña. Los comicios del 14 de febrero de 2021 dieron un vuelco a las posiciones dominantes en Cataluña. El descalabro de Ciudadanos -pasó de 36 escaños a 6- y el leve descenso de Junts -obtuvo 32 representantes, dos menos que en 2017- supusieron el fracaso de la vía dura en la fase postprocés. La “vía amplia” de ERC y la apuesta por el diálogo entre los dos Gobiernos abanderada por el PSC, con Salvador Illa como candidato, valieron a ambos partidos una victoria con empate técnico y 33 escaños cada uno. Finalmente ERC formó Gobierno con Junts, no sin grandes dificultades para acordar los siguientes pasos en la ruta hacia la independencia, un plan que no han abandonado. Los socios minoritarios querían una estrategia coordinada por el Consell per la República, presidido desde Waterloo (Bélgica) por el expresident Carles Puigdemont, pero los de Aragonès exigían que estuviera bajo el paraguas del Govern.

El acuerdo entre ERC y Junts. En el acuerdo de legislatura firmado por ambos socios del Govern, en el apartado dedicado al “Proceso de Negociación”, ya se hacía referencia al “escepticismo” y las “dudas” de Junts respecto a la mesa de diálogo con el Ejecutivo central. En el redactado, ambos partidos acordaban trabajar “desde la confianza y la lealtad mutua” y precisaban que la delegación catalana sería escogida “por consenso y nombrada por el Govern”, sin precisar más. No se explicitaba, por tanto, que los miembros de esa mesa tuvieran que ser miembros del Gobierno de la Generalitat.

La aprobación de los indultos. El 22 de junio de 2021, “por utilidad pública”, el Ejecutivo de Pedro Sánchez aprueba los indultos parciales y condicionados a los nueve líderes independentistas presos por el juicio del procés: Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart, Joaquim Forn, Josep Rull, Carme Forcadell, Jordi Turull, Raül Romeva y Dolors Bassa. A pesar de que desde el independentismo se reclamaba el referéndum de autodeterminación y la amnistía a todos los encausados por el procés, la aprobación de los indultos contribuyó a acercar a ambos Ejecutivos de cara al restablecimiento de la mesa de diálogo.

La composición de la mesa. La obligación de que la delegación catalana en la mesa de diálogo estuviera integrada exclusivamente por consejeros del Govern no se llegó a fijar de forma expresa en el pacto de legislatura entre ERC y Junts. Pero implícitamente esa era la posición. De hecho, el president Aragonès siempre se ha referido públicamente a que los miembros de la delegación catalana serían miembros del Govern. Algo que hasta este martes no fue nunca cuestionado o puesto en tela de juicio por Junts. En lo concerniente a la delegación del Gobierno central, además del presidente, Pedro Sánchez, participarán la vicepresidenta Yolanda Díaz y los ministros Félix Bolaños, Miquel Iceta e Isabel Rodríguez.

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