_
_
_
_

Varias comunidades propondrán al Gobierno un toque de queda para frenar los contagios de coronavirus

Castilla y León, la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha se han mostrado favorables a esta medida. La actitud de Madrid en las últimas semanas hace imprevisible su posición

Control policial en la localidad burgalesa de Aranda de Duero, este martes.
Control policial en la localidad burgalesa de Aranda de Duero, este martes.PacoSantamaria (EFE)

Un día después de que España superara el millón de contagios por covid-19, el Gobierno y las comunidades autónomas se reúnen este jueves en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud para discutir la actualización del plan de respuesta ante el coronavirus. El objetivo es frenar la segunda ola de contagios, que en las últimas 24 horas ha dejado un balance de 16.973 nuevos casos, la cifra más alta durante la pandemia. Sobre la mesa un texto que han ido puliendo durante la semana y la posibilidad de aplicar un toque de queda, una medida que quieren plantear varias comunidades.

La negociación política ha sido muy intensa durante toda la semana para llegar al consejo interterritorial con un pacto mucho más cerrado que el de la última vez, cuando Madrid y varias comunidades del PP votaron en contra del documento propuesto por Sanidad y se abrió una fuerte crisis política que acabó con la declaración del estado de alarma en Madrid. Esta vez, según fuentes tanto del Gobierno como de varias autonomías, el ambiente es muy diferente, pero la actitud de Madrid siempre hace imprevisible el resultado final. Hay un asunto clave que no está en el documento pero sí en las conversaciones de estos días, y que se puede convertir en el gran protagonista de la reunión, sobre todo si hay acuerdo: es el toque de queda, que algunos consejeros también llaman confinamiento nocturno.

Varias comunidades de distinto signo político tienen la intención de proponerlo en la reunión de la interterritorial este jueves. Castilla y León, gobernada por el PP pero con una consejera propuesta por Ciudadanos y que tiene un gran respeto técnico de sus compañeros en la interterritorial, Verónica Casado, ya apuntó la semana pasada que sería una buena idea un toque de queda como el que se está planteando en Francia y este jueves lleva esta intención. El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea (Ciudadanos), ha confirmado este jueves que solicitarán el toque de queda. “No puede pasar el día de hoy, es el momento de tomar decisiones por duras y drásticas que sean”. Igea considera que si no hay acuerdo en el Consejo Interterritorial, el Gobierno debe asumir “su responsabilidad”: “Tienen que tomar las medidas necesarias para preservar la vida de miles de españoles, no se puede esperar un solo día más”.

La Generalitat valenciana ha hecho público antes de la reunión que propone un toque de queda hasta el 9 de diciembre desde la media noche y hasta las cinco de la madrugada. El presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, ha trasladado a los representantes de los agentes sociales valencianos (la patronal CEV y los sindicatos CC OO y UGT) su intención de proponer al Gobierno un toque de queda hasta el 9 de diciembre y que entraría en vigor en los próximos días desde la media noche y hasta las seis de la mañana. Tras la reunión, los agentes han manifestado a los medios de comunicación su confianza en que la decisión del toque de queda se tome de manera general y uniforme en toda España. En el caso de no ser así, han señalado que Puig pretende adoptarla en la comunidad autónoma.

Otros consejeros, estos del PSOE, como el de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández, también tienen intenciones de proponer esta medida. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, ha pedido “un planteamiento ahormado a nivel nacional”. Otras se han mostrado favorables si se aprueba para toda España. En ese caso, Canarias pediría quedar excluida dada la evolución favorable de la pandemia en las islas. Queda la incógnita de Madrid, que dijo que lo quería pero luego dio marcha atrás.

Andalucía, gobernada por el PP, no se ha pronunciado a favor del toque de queda, pero este mismo jueves ha endurecido medidas que restringen actividades de ocio nocturnas. En Sevilla, Córdoba y Jaén los bares deberán cerrar a las 22.00 y reducir su aforo al 50%, quedarán prohibidas las visitas a las residencias de mayores; la asistencia a velatorios se limita a 15 personas en el exterior y a 10 en el interior y en las bodas y otras celebraciones a 30.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Una medida sencilla de aplicar

Lo que no está claro aún es a partir de qué hora regiría. Las comunidades más estrictas apuestan por hacerlo desde las 21.00, como en Francia, y otras están pensando más bien en las 00.00. Pero, en cualquier caso, distintas fuentes de las autonomías y del Gobierno consultadas señalan que hay bastante consenso sobre la utilidad de esta medida. Es sencilla de aplicar, porque permite a la policía un control muy fácil de las calles a partir de una hora, y no supone una gran alteración de la actividad económica, ya que se trata de horarios en los que ya hay limitaciones en muchas autonomías. Se permitiría así mantener bares y restaurantes abiertos durante todo el día. Es una medida pensada para impedir las reuniones en las casas hasta muy tarde y las fiestas ilegales que algunos están convocando ante el cierre de los bares.

Al impedir el movimiento por las calles durante toda la noche, se limita mucho la posibilidad de que los ciudadanos se animen a acudir a esas reuniones que no están permitidas. Y tampoco altera la vida del resto de los ciudadanos que ya no salían a esa hora, la gran mayoría.

El problema es político y jurídico. El Gobierno tiene claro que este toque de queda solo se puede hacer con estado de alarma. La mayoría de las comunidades está de acuerdo. Pero no está clara la posición del PP. Lo que el ministro Salvador Illa quiere evitar es aprobar el estado de alarma limitado solo para el toque de queda y luego encontrarse con que no tiene apoyo político en el Congreso para prorrogarlo después de los primeros 15 días.

Fuentes de las autonomías consultadas señalan que es una medida que debería extenderse al menos un mes para que sea eficaz y sobre todo logre reducir el nivel de contagio antes de la Navidad, una época que inquieta especialmente a todos los consejeros de Sanidad autonómicos.

Con información de Eva Saiz, Ferrán Bono y Juan Navarro.

Información sobre el coronavirus

- Aquí puede seguir la última hora sobre la evolución de la pandemia

- Así evoluciona la curva del coronavirus en el mundo

- Descárguese la aplicación de rastreo para España

- Buscador: La nueva normalidad por municipios

- Guía de actuación ante la enfermedad

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_