Saqueadores de tumbas en el Antiguo Egipto
Los misterios al descubierto de la aldea de Gourna, al oeste de Luxor, base de quienes hicieron del expolio de las tumbas de los nobles su forma de vida. En esta investigación fotográfica, la fotógrafa María Primo se adentra en la relación entre cultura y naturaleza, progreso y conservación a través de la antigua civilización egipcia.

En octubre de 2021, la fotógrafa María Primo fue invitada a una residencia de artista en Luxor por la Consejería de Cultura de la Embajada de España en Egipto. Se alojó en el Marsam, un hotel con encanto de 1920 cargado de historia en las faldas de la necrópolis tebana, al oeste de Luxor (antigua Tebas), en la orilla occidental del Nilo. En esta montaña sagrada, coronada por el pico Qúrn, con forma de pirámide, se encuentran el Valle de los Reyes, de las Reinas, de los Artesanos, de los Nobles y muchos otros grandes templos del Antiguo Egipto. También en su ladera encontramos los restos de la aldea de Gourna (Al Qúrna), cuyos primeros asentamientos datan del siglo XVII.
Fue un pueblo que se expandió sobre las tumbas de los nobles, sin ningún orden debido al tráfico descontrolado de antigüedades por la demanda del mercado internacional. En 1940 tuvo lugar el primer amago para reubicar a los 7.000 residentes del lugar por parte del Gobierno, que encargó al aclamado arquitecto Hassan Fathy, pionero mundial de la arquitectura sostenible, construir un nuevo pueblo que se convirtió en su icónico proyecto gracias a la sofisticada tecnología adaptada al entorno y en el modo en que se pensó en las poblaciones sin recursos.
“Durante mi estancia me concentré en visitar estos lugares, investigar las historias sobre ladrones de tumbas y arquitectura sostenible. Además, inspirada en la antigua civilización egipcia, donde el medio natural formaba parte de su cosmovisión, quería profundizar en la relación de cultura y naturaleza, de lo moderno y lo tradicional, del progreso y la conservación, con historias sobre el Nilo, árboles sagrados, cambio climático, impacto del turismo y el papel de la mujer, donde todo está interconectado”, recuerda Primo. Como dijo Donna Haraway, “nada está conectado a todo, todo está conectado a algo”.










Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Al menos dos muertos y ocho heridos en un tiroteo en la universidad de Brown, en Estados Unidos
‘Los domingos’, en cine, y ‘Anatomía de un instante’, en serie, ganan en los premios Forqué 2025
Hamás acusa a Israel de “socavar el alto el fuego” en Gaza al atacar al número dos de su brazo armado
Pedri dirige y Raphinha ejecuta en el Barça de Flick
Lo más visto
- Guardiola elimina la prohibición de que los jefes de servicio de la sanidad pública ejerzan en la privada y sube un 59% la derivación de pruebas
- El jefe de la misión de rescate de María Corina Machado: “Fue una de las operaciones de mayor riesgo en las que he participado”
- Rusia eleva la presión sobre la UE con una demanda para evitar que financie a Ucrania con sus activos congelados
- Los 50 mejores libros de 2025
- Sin duchas ni camas adecuadas, y con obras en marcha: así estrenaron 30 niños extranjeros el centro de acogida de La Cantueña de Ayuso




























































