De sábanas a prendas: el sueño de la moda circular

Nuestra visión de la moda ha cambiado. La estética sigue siendo importante, pero ya no es lo único en lo que nos fijamos cuando elegimos una prenda. El impacto que produce en nuestro entorno cada elemento que entra en nuestro armario es un aspecto al que le damos más importancia y, por ello, encontrar maneras de fabricarla más sostenibles y respetuosas con el planeta se ha convertido en una prioridad.

Ese es el objetivo de Wearcycle, un programa de economía circular puesto en marcha por Loreak Mendian, la firma que, desde su creación en San Sebastián a mediados de los 90, ha ayudado a impulsar la moda urbana, funcional y versátil. “En Loreak Mendian hemos redefinido el proceso de creación lineal para convertirlo en circular. Ahora, una sábana de hotel puede convertirse en una camiseta o una sudadera”, explica Edu Uribesalgo, del Departamento de Innovación de la firma. Una apuesta que, ahora, se fija en los materiales textiles que provienen de otros usos para crear con ellos prendas que no solo siguen los principios estéticos y de calidad de la marca, sino que ayudan a cerrar el círculo de la sostenibilidad.

Transformar el pasado

Convertir materiales desechados en materia prima implica cambios en toda la cadena de creación, un reto que la firma ha afrontado desde el inicio del proceso. “Implica tener que industrializar una serie de procesos que no estaban definidos y, por tanto, el reto principal es su producción, desde la recogida del residuo y todos los pasos posteriores hasta la realización de los tejidos”, relata Uribesalgo.

“Ahora, una sábana de hotel puede convertirse en una camiseta o una sudadera”

Edu Uribesalgo, del departamento de Innovación de Loreak Mendian

Para ello, se fijaron en aquellos productos textiles que había completado ya su vida útil, y que están relacionados con sectores industriales. “Llevamos tiempo reciclando residuos provenientes de otros sectores y tuvimos conocimiento de que había una lavandería industrial que lavaba sábanas de hoteles en Gipuzkoa. Contactamos con ellos y recogimos dos toneladas de sábanas blancas estropeadas”.

Ese material fue triturado mediante un proceso mecánico y, posteriormente, se utilizó para realizar la fibra de algodón utilizada en esta colección. De esta forma, un producto, cuyo destino era acabar en un vertedero ha sido convertido en nuevos diseños de la marca. El resultado es una colección de 11 prendas, desde sudaderas a camisetas, “atemporales y basadas en la misma materia para que puedan ser reciclables al final de su ciclo de vida”, apunta Uribesalgo. También, una manera de reflexionar sobre la reutilización de recursos y la importancia de encontrar soluciones imaginativas que reduzcan el impacto de la industria de la moda en nuestro planeta.

Ecodiseño

El proyecto Wearcycle engloba otras medidas de la firma, conformando una filosofía en la que la sostenibilidad es tan importante como el diseño. “Estamos trabajando para que todos nuestros productos sean reciclados, reciclables o biodegradables”, cuenta Uribesalgo. “Para ello es muy importante crear prendas monomateriales, para facilitar su reciclaje, que sean duraderas en el tiempo y fomentar su reparación mientras duren. Es necesario mantener el mayor tiempo posible esta materia prima en el circuito evitando que se convierta en residuo y que acaben en un vertedero”.

“Tenemos que diseñar productos estéticamente atractivos y duraderos, teniendo también en cuenta qué va a pasar con ellos al final del ciclo de su vida”, prosigue Uribesalgo. “También es muy importante la búsqueda de soluciones en toda la cadena en general, que reduzcan la huella hídrica y energética para, a su vez, reducir la huella de carbono”.

Una apuesta, por tanto, por la economía circular para demostrar que no es necesario renunciar a la estética para construir una moda (y un mundo)más sostenible, dentro de una filosofía que la marca resume en una frase: fashion made of dreams (“moda hecha de sueños”).