_
_
_
_

Las reseñas de los turistas, tan útiles o tan inútiles: una cuenta de Twitter señala comentarios absurdos sobre Asturias

El perfil Pisapraos n'Asturies ha conseguido más de 13.400 seguidores en dos meses con sus respuestas cómicas sobre las opiniones a la gastronomía o la naturaleza del Principado

Visitantes en los lagos de Covadonga, en Asturias.
Visitantes en los lagos de Covadonga, en Asturias.Richard Baker (getty images)

Dos meses escasos ha sido lo que ha necesitado la cuenta de Twitter @AsturiesN para conseguir más de 13.400 seguidores y convertirse en tendencia en la red social. ¿Cómo? Capturando, publicando y comentando opiniones y quejas sobre Asturias que los turistas pisapraos (así es como se denomina tradicionalmente en el Principado a aquellos montañeros que acostumbran a recorrer rutas sencillas, de baja dificultad técnica y poco peligro de accidente) dejan en Google y otros foros de viajeros, como que en el Parque Natural de Redes los caminos son de cabra, muy empinados, con mucha maleza y, además, el entorno está lleno de animales peligrosos. Si decir algo así de un espacio protegido provoca risa, la respuesta de Pisapraos n'Asturies (siempre en asturiano) desata la carcajada: “Propuesta para el Parque Natural de Redes: bares, asfaltar, aplanar, fumigar plantas y exterminar cabras”.

Recopilamos algunas críticas (con sus zascas correspondientes) aparecidas en esta cuenta desde que se publicó su primer mensaje el pasado 22 de abril que, como curiosidad, solo sigue a dos usuarios: la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y la cuenta oficial de Turismo de la Comunidad de Madrid. 

Naturaleza bonita, pero poco adaptada 

Ya lo hemos comprobado: los turistas pisapraos consideran que la montaña es preciosa, sí, pero excesivamente empinada para su gusto. Y, además, hay un evidente exceso de maleza: “Poco cuidado, mucha maleza que evita poder ver las lagunas”. Una pena que “la naturaleza nunca deja ver la naturaleza”, responde @AsturiesN. Hay usuarios que ven un problema grave en playas que tienen la mala costumbre de ser de roca y no de arena. Y atención quien quiera ir a los Bufones de Pría, donde, en días de fuerte marejada, los chorros de agua salen de grietas y chimeneas que conectan el mar con la tierra: “Deberían avisar cuando no hay olas y no se puede ver saltar el agua antes de andar hasta allí para nada”. Respuesta de @AsturiesN: “Deberíamos tener una web para informar del estado de la mar. Podríamos llamarla Agencia Estatal de Meteorología e informar también del viento, las tormentas etc.”.

A vueltas con la gastronomía 

En Asturias se come abundantemente, y bien de precio. Es una frase recurrente entre quienes visitan el Principado pero, como nunca llueve a gusto de todos, la gastronomía despierta críticas. “No muy simpáticos y si pides un menú para dos (mucha comida) te cobran casi como dos menús. Cachopo algo aceitoso”, escribe un tuitero. Otros creen que los pueblos pequeños deberían ser, por norma, más baratos que las ciudades. “Aquí la comida es buena pero cara. Y lo ideal sería que todo fuera normal. Un bar en plena montaña no debe tener precios a nivel de Gijón o Avilés”. O: “Fuimos a cenar un domingo y nos pareció caro para estar en un pueblo muy pequeño en Asturias. Nos cobraron 12 euros por persona por lo que viene siendo un menú. Ensalada de lechuga, tomate y tres trozos de cebolla de primero, cabrito con patatas fritas de segundo, postre y café”. Respuesta de @AsturiesN: “Una hamburguesa industrial en un pan, unas patatas fritas como alambres de finas y agua sucia en un vaso de papel son 10 euros en una metrópoli”.

No nos avisaron de que había niebla

A los lagos de Covadonga solo puede acceder por una sinuosa carretera un número limitado de vehículos privados, por lo que lo mejor es pagar el autobús lanzadera o el taxi que llega hasta arriba, y eso no gustó nada a un usuario que, para más inri, eligió un mal día para visitar la zona: “Fuimos en un mal día, lloviendo y algo de niebla. Nadie te avisa que no se ve nada, solo pretenden coger el dinero por subir a los lagos”. Y quien dice niebla dice otros inconvenientes, como exceso de mosquitos en la reserva natural de Muniellos. Temporal: “No es culpa de la playa, pero estaba la bandera roja por temporal, qué pena”. O perros: “Nosotros dejamos el coche en la entrada del pueblo, esperando dar un bonito paseo. A medida que íbamos por las calles, nos iban saliendo perros con cara de pocos amigos. Al sexto perro nos cansamos ya, y nos quedamos sin ver el Teixu...”.

¿Reserva? ¿Qué reserva? 

“Un buen pisapraos no entiende el sistema de reservas", sentencia @AsturiesN tras el comentario de un visitante enfadado porque no le habían atendido en un restaurante... en el que no había reservado. Llegar a un sitio a la aventura (ya sea para comer o visitar) y encontrarte con que no puedes entrar no sienta nada bien: “Mala política de visitas, hay que reservar para entrar. Hice 900 kilómetros y cuando llegué quedaba una hora para el cierre al mediodía. Y si quería ver la mina tenía que reservar visita y esperar a las cinco de la tarde. Lástima, no la vimos".

Me lo esperaba mejor

El banco del paseo de San Pedro de la localidad de Llanes ofrece unas vistas insuficientes, a juicio de un turista: “Fui con idea de encontrar un lugar idílico. Pero no fue así. Estás cerca de los acantilados pero sentado solo ves mar. Mejor no ir en verano pues sin sombras te da un golpe de calor. Creo hay mejores bancos”. Menos mal que allí estaba @AsturiesN para darle una solución: “Solo ves el mar. Siéntate al revés”. Son recurrentes los comentarios de quien llega a un lugar muy ilusionado y cuenta, decepcionado, que tampoco era para tanto. A una usuaria no le gustó nada el puente o puentón romano de Cangas de Onís, uno de los símbolos de Asturias, Monumento Histórico Artístico desde 1931: “Un puente normal y corriente como otro cualquiera, la única diferencia es que le cuelga una cruz del centro. Los he visto mejores”. Otro consideró Santa María del Naranco un monumento “de incierta utilidad" y “absolutamente insípido”.

Las reseñas de los turistas en redes sociales, tan útiles y tan inútiles a veces...

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_