Así se convirtió en un éxito Wikiloc: la plataforma española de rutas al aire libre con más de 10 millones de usuarios
Nacida en 2006, hoy es en un referente mundial del ocio al aire libre. Ofrece más de 30 millones de rutas de hasta 80 actividades diferentes por todo el mundo, creadas y compartidas por los usuarios
Nada hacía sospechar a Jordi Ramot (Sant Feliu de Guíxols, 49 años) que su interés por compartir sus rutas al aire libre podría coincidir con el de tanta gente. En 2006, este informático de profesión decidió crear una web donde iba a ir subiendo los recorridos que hacía con su bicicleta de montaña, acompañados con fotografías e información útil. Un experimento, aplaudido entonces por su entorno que le animó a profesionalizarlo, que ha ido creciendo a lo largo de los años hasta convertirse en una de las aplicaciones móviles y plataformas web más demandadas por los usuarios de ocio y deporte al aire libre en todo el mundo.
Wikiloc nació en el momento y en el sitio adecuados. “Empezaban a aparecer las primeras redes sociales que cultivaban ese espíritu de comunidad”, cuenta Ramot a El Viajero. “La idea era que cualquiera pudiera registrar y documentar las rutas que realizaba por la montaña o un entorno rural para que otros también pudieran hacerlas, seguir a otros usuarios, compartir intereses y experiencias…”, añade.
Aunque en los primeros años los usuarios ya se contaban por miles, fue en 2011, con la creación de la aplicación móvil para los sistemas operativos Android e iOS, cuando Wikiloc comenzó su extraordinario crecimiento. “Supuso la democratización de las rutas guiadas, sin tener que transferir los recorridos del ordenador al GPS”, explica. Otro hito para la start up española fue el acuerdo que firmó con Google Earth, la plataforma cartográfica del gigante tecnológico que habilitó las rutas de Wikiloc en su sistema. “La pandemia también contribuyó aún más a popularizar las actividades al aire libre”, añade Ramot.
La comunidad de Wikiloc ha alcanzado en 2022 los 10 millones de usuarios en todo el mundo y 32 millones de rutas compartidas de hasta 80 actividades diferentes: desde las más comunes como senderismo, ciclismo o rutas para correr hasta itinerarios a caballo, para observar aves, para personas con discapacidad visual, de esquí, en segway o canoa, e incluso de plogging, en las que se aprovechan las excursiones a pie para retirar basura de los entornos naturales.
La aplicación de los turistas activos
Wikiloc es una herramienta para descubrir nuevos lugares, ya sea durante escapadas cercanas al lugar de residencia o en viajes más lejanos. “Lo utilizan principalmente personas que buscan realizar un turismo activo cuando visitan algún lugar”, explica su fundador. En España, con una geografía privilegiada en variedad, existen rutas por todo el territorio. Según datos de la propia compañía, donde más se utiliza Wikiloc es en Baleares y Canarias.
En todos estos años, Ramot y su equipo no han empleado grandes recursos en la promoción de Wikiloc, su expansión ha sido principalmente orgánica, “del boca a boca”. “Los españoles también somos muy viajeros, y en los inicios de la plataforma fueron los propios usuarios de los que abrieron nuevas rutas en otros países”, recuerda este emprendedor. “O de repente una comunidad de Islandia o de Irán se agrupan para hacer senderismo y empiezan a utilizar la aplicación. Esto permite seguir los pasos de personas locales”, celebra. Este tipo de uso ha hecho posible que ya existan recorridos por todo el mundo, desde el continente americano hasta islas remotas en el sureste asiático, pasando por países africanos, e incluso la Antártida. La plataforma está disponible en 24 idiomas. “No queríamos que la barrera idiomática frenara su uso”, matiza su creador.
Pero Wikiloc no se queda únicamente en los entornos naturales. En los últimos años, ha crecido el afán también por registrar rutas urbanas. “Hace poco, en Barcelona, eché un vistazo a la app y vi que alguien había subido una ruta siguiendo diferentes lugares relacionados con arquitectura gótica de la ciudad”, pone de ejemplo Ramot. La compañía también ha habilitado una opción para que marcas y entidades turísticas puedan promocionarse a través de Wikiloc.
La plataforma dispone de una versión gratuita para descubrir y seguir nuevas rutas, grabar las propias, seguir a otros usuarios y descargar los mapas que ofrece la aplicación. Pero también ofrece una opción premium por 9,99 euros al año (o trimestral por 4,99 euros) que permite realizar todas estas acciones sin conexión a internet y acceder a rutas con filtros más avanzados. El 1% de la recaudación de Wikiloc se destina a ONG que trabajan para proteger el planeta.
La start up ha recibido premios de entidades como Google Maps España, National Geographic, Ashoka Changemakers, Garmin o la Sociedad Geográfica Española (SGE). Para su fundador, supone un reconocimiento del potencial que aún tiene Wikiloc: “Todavía quedan muchos lugares por descubrir”. El pequeño equipo que conforma la plataforma, de apenas 16 personas, busca seguir creciendo en usuarios y para ello trabajan en mejorar sus experiencias. “Cualquier aspecto técnico que pueda facilitar su uso”, apunta Ramot, “pero no vamos a inventarnos nada nuevo, queremos mantenernos fieles a nuestra identidad”.
¿No sabe qué ruta escoger? Wikiloc propone algunas de las más populares e interesantes
Escoger una ruta depende de muchos factores: el lugar, el tiempo del que se dispone, la intensidad, el tipo de actividad que se quiere realizar… Wikiloc ofrece filtros para que la búsqueda y elección del recorrido sean más fáciles. Pero si, aun así, a uno le puede la indecisión, en la sección Discovery de la plataforma se encuentran algunos de los mejores planes basados en la popularidad que tienen entre la comunidad.
Con la llegada del verano y el calor, puede ser una buena idea hacer recorridos nocturnos, con temperaturas más agradables y con la posibilidad también de observar las estrellas. Los usuarios de Wikiloc recomiendan algunos de los mejores lugares del mundo para esta práctica y rutas para llegar hasta ellos. En España, un entorno privilegiado para observar el cielo de noches es el pico Roque de los Muchachos y su famoso observatorio astronómico, en la isla de La Palma. En países como Tanzania, Chile, Sri Lanka o Estados Unidos también se dan indicaciones para descubrir magníficos lugares alejados de la contaminación lumínica.
Si con estas rutas lo que se pretende es descubrir volcanes activos, La Palma también podría ser un buen destino, además de otros, como la vecina Tenerife y el Teide; la zona de Fimmvörðuháls, en Islandia; el volcán Erta Ale, en Etiopía; el complejo estratovolcánico de Kawah Ijen situado en una caldera de 16 kilómetros en la isla de Java Oriental (Indonesia); o el monte Fuji de Japón.
También hay rutas para explorar parajes impresionantes de la península Ibérica, como el parque nacional de Picos de Europa, en Asturias: recorridos a lo largo del río Cares, por los lagos de Covadonga, pasando por el Naranjo de Bulnes —en el corazón del parque— o para observar los Puertos de Áliva desde el teleférico de Fuente Dé.
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