Sin título (2000). La ficción de los objetos Ya desde sus primeras obras, aquellas que realiza en la década de los ochenta, late en Chema Madoz el impulso de la construcción de las imágenes, así como de la búsqueda de asociaciones insólitas, algo que persistirá a lo largo de toda su trayectoria artística. En la mayoría de esas primeras obras, el artista trabaja con la presencia de la figura humana, a veces completa otras con partes del cuerpo, realiza sus instantáneas en el exterior utilizando luz natural y asocia su trabajo a lo que podríamos considerar como fotografía de calle. En esas imágenes es importante la presencia de la naturaleza. A veces trabaja con la semejanza, como cuando asocia los dedos de la mano con las hojas abiertas de una planta o la cabellera de una mujer con un seto; otras con la evocación, como cuando la cortina se abre a un camino infinito.
Tras una crisis creativa, abandona la idea de azar, de reportaje, así como la luz natural y los modelos, y a partir de los años noventa la sustituye por la recreación de imágenes mentales por medio del uso de objetos y de elementos de la naturaleza. El primer objeto que utiliza es la “llave antigua” (1990) en la que labra una cerradura en la parte posterior.
- 'La naturaleza de las cosas' (La Fábrica), libro y exposición en el Real Jardín Botánico de Madrid, del 14 de diciembre de 2019 al 1 de marzo de 2020.