Un reportaje gráfico dedicado a los dos únicos ejemplares de rinoceronte blanco del norte que quedan en el mundo y a sus cuidadores. El fotógrafo Justin Mott documenta historias de personas que arriesgan sus vidas por salvar animales en peligro de extinción. Su trabajo No Man s land puede verse en la galería neoyorkina Anastasia Photo hasta el 15 de septiembre