_
_
_
_
Alterconsumismo
Coordinado por Anna Argemí
_

El cooperativismo es super

Madrid contará con un primer supermercado cooperativo en enero del 2020

Más información
Yo tengo un super
La película que crea supermercados

En el 2014 escribí por primera vez sobre los supermercados cooperativos. Por aquel entonces los promotores de La Louve (La Loba, en francés) anunciaban la apertura del primer supermercado cooperativo de Europa para el 2015 en el París intramuros. Detrás del invento, dos norteamericanos que querían replicar en Francia el éxito del mítico Park Slope Food Coop de Nueva York, el primer supermercado cooperativo del mundo: cuenta con 17.000 socios, ha creado 80 puestos de trabajo y genera ingresos a mansalva, ingresos que además se reinvierten en el proyecto común y comunitario. Y así andan de felices desde el siglo pasado, desde 1973. Hablé de todo ello en el artículo Yo tengo un super.

(c) La Louve

La Louve abrió las puertas oficialmente en París un poco más tarde de lo previsto, en noviembre del 2017, después de una fase de test de un año. Hoy en día cuenta ya con más de 7.000 socios y ha creado ocho puestos de trabajo. Uno de sus fundadores, Tom Boothe, no quedó contento con la simple creación del supermercado. Había que ir más lejos. Así que rodó un documental sobre Park Slope Food Coop, que se estrenó en Francia en noviembre del 2016. Lo expliqué en el post La película que crea supermercados. El título le va de perillas al post porque desde la exhibición del film, que se llama Food Coop, se han multiplicado los supermercados cooperativos en Francia sin prisa pero sin pausa. Hoy en día, dos años y medio más tarde, hay ya más de 30 repartidos por toda la geografía. En este mapa pueden visualizarse cuáles son y dónde se encuentran.

En mi post sobre Food Coop acababa preguntándome si algún día florecerían los supermercados cooperativos también en España. Y hoy estoy feliz de poder escribir que sí, que la onda expansiva ha cruzado la frontera. El proyecto MARES Madrid trajo el documental a España y está acompañando el alumbramiento de dos proyectos en Madrid: Supercoop en Lavapiés y La Osa Cooperativa en Ventilla.

La Osa Cooperativa está más avanzada pues prevé abrir las puertas a sus socios dentro de medio año, en enero del 2020 en el barrio de Tetuán. Quiere replicar a su vez el modelo de ‘La Louve’ y de ‘Park Slope Food Coop’. De hecho los promotores, los mismos de la cooperativa 2decologico en Malasaña, han estado una semana en París para aprehender todo el know-how de La Louve. Se han decidido ya a alquilar un local de 800m2 y están cerrando los flecos de la financiación. En septiembre prevén lanzar una campaña de crowdfunding participativo.

Cada socio deberá aportar cada cuatro semanas 3 horas consecutivas de trabajo en el supermercado

Cuentan con unos 300 socios de momento pero esperan poder llegar a fin de año con más de 1.000. La experiencia de ‘Park Slope Food Coop’ y ‘La Louve’ demuestra que, dependiendo de la superficie, se necesita un promedio de entre 1.000 a 1.500 socios para hacer funcionar el supermercado. Para convertirse en socio de La Osa se requiere un pago único de 100€, lo que permitirá acceder al recinto y comprar productos de calidad y a buen precio: 4.000 referencias de alimentación, higiene, cosmética y limpieza que serán seleccionados en función de su impacto social positivo (de pequeños productores, de proyectos integradores…) y de su bajo impacto ambiental (a granel, locales y de proximidad).

El socio tiene derecho a acceder al local y a comprar pero también puede contribuir, si quiere, a la construcción de la cooperativa integrando una de las comisiones, como la de financiación, la de informática, la legal o la de comunicación, por poner unos ejemplos. En todo caso, el socio en tanto que copropietario está invitado a asistir y votar en las asambleas generales. Y una vez abierto el supermercado el socio cooperativista dará unas cuantas horas de su tiempo para garantizar el buen funcionamiento del comercio. En concreto cada socio deberá aportar cada cuatro semanas 3 horas consecutivas de trabajo en el supermercado, que puede ser tanto la caja, como la recepción, reposición de productos, limpieza, atención al cliente...

Las cifras del éxito económico de ‘Park Slope Food’ y de ‘La Louve’ no son lo más interesante ni lo más importante en el caso de los supermercados cooperativos, sino las que nos hablan de un éxito social. Se trata del empoderamiento del consumidor: de la toma de conciencia de la importancia de lo que comemos, por nuestra salud y la del planeta. El consumidor se hace por fin adulto y se convierte a la vez en copropietario y cotrabajador.

La Oca Coop

Los supermercados cooperativos tienen el gran mérito de permitir a todo ciudadano el acceso a un precio razonable a productos de calidad, que no son sinónimo para nada de productos de marca, como las grandes superficies nos quieren hacer creer. ¿Qué mayor lujo que zamparse una fruta de temporada, de ámbito local, que no haya sido tratada con OGM…?

El proyecto de La Osa pinta muy chulo en muchos sentidos. Y encima de sano y saludable parece que tiene muy buen rollo y mucha marcha. Ya me gustaría vivir en Malasaña para codearme con los miembros de sus Grupos de Consumo (G.C.) que están en el origen de La Osa. A las pruebas me remito: este vídeo más que enrollado.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_