Por qué se me pega la cortina de la ducha y otros ocho fenómenos en casa con explicación (y solución) científica
Por qué huelen las cañerías antes de llover o cómo diablos se enredan los cables dentro del cajón
No es cosa de brujería ni de fuerzas paranormales. Las leyes más elementales de la física también rigen dentro de tu hogar. Capaces son de llenar el baño con un hedor infernal o de enredar hasta el infinito los cables de los electrodomésticos. Por suerte, no hace falta tener un doctorado en ciencias para evitarlo. Con un poco de maña y herramientas elementales —destornillador, tijeras, cintas adhesivas…— puedes convertir tu casa en tu lugar menos hostil.
¿Por qué el desagüe apesta antes de llover?
Hay personas con el extraño don de predecir las precipitaciones sin necesidad de conectar con la AEMET: los reumáticos o enfermos de artrosis y aquellos con problemas en las cañerías. Y todos por la misma razón: las bajas presiones atmosféricas. En el caso de la fontanería, no hay más que consultar al especialista para que dé buena cuenta del fenómeno: "Cuando se acercan precipitaciones, baja la presión atmosférica. Esto facilita que suban los gases de las cloacas y partes inferiores del sistema de canalización y entren en nuestras casas", explican desde Netjet, una empresa especializada en desatrancos. No hace falta que las cañerías estén obstruidas. Basta con que el bote sifónico ande vacío para que los gases pestilentes de las bajantes (por las que fluyen detritus, restos de comida y otras inmundicias) o de las cloacas se cuelen en casa.
¿Cómo evito que los cojines del sofá se muevan todo el tiempo?
Más de ocho millones de resultados arroja Google si le preguntas por una solución para que los cojines del sofá se mantengan en su sitio. En la tienda todo perfecto, pero es usarlo en casa y, a la quinta película, el sofá empieza a engullirte hacia ese hueco donde acaban todas las monedas de cinco céntimos, las horquillas y alguna que otra palomita. Ya lo explicaba Newton: si un objeto (el sufrido usuario del sofá) ejerce fuerza sobre otro, el segundo (la estructura del sofá) devuelve la misma fuerza en la dirección opuesta; el cojín queda en medio de esa batalla de fuerzas y acaba por vencer hacia adelante o hacia los lados, según qué salida sea la más holgada.
Internet ofrece toda clase de soluciones: desde coser una anilla al sofá y al cojín en los extremos posterior y anterior hasta mallas antideslizantes, sin dejar de lado, claro, el socorrido velcro (muchos vienen ya con una tira en la parte frontal, con lo que bastaría con añadir otra en la trasera). Los que prefieren tenerlo todo m¡bien atado quizá quieran usar todas las soluciones a la vez.
¿Por qué se me pega la cortina de la ducha?
Una de las sensaciones más desagradables en la ducha es cuando la cortina vuela hacia el interior con afán de pegarse al cuerpo de quien está bajo el torrente de agua. David Schmidt, ingeniero de la Universidad de Massachusetts, creó un modelo por ordenador para analizar el fenómeno. "Lo que genera ese efecto de succión es que el agua pulverizada crea un vórtice de baja presión en el interior de la ducha que contrasta con la alta presión del exterior", señala este profesor. "Es el mismo principio de Bernoulli que permite que los aviones se mantengan en el aire". Las soluciones para evitar ser engullido por la cortina son variadas: desde hacerse con una cortina de mayor peso (cuanto más fina, más vuela) a colocar ventosas o imanes en la parte inferior que impidan que se mueva (sí, el interior de la ducha es metálico y los imanes funcionan igual de bien que en la nevera).
¿Por qué esa puerta se cierra sola?
No busques a Íker Jiménez ni a un parapsicólogo, tu casa no está embrujada. La razón está en la propia puerta: el marco se ha desplomado de la pared. Hay dos opciones para solucionarlo. La más contundente y definitiva es desmontar todo el marco y volver a montarlo todo a plomo. Hay otra opción, chapucera y de andar por casa, para dificultar ese deslizamiento de la puerta: crear muescas en el espárrago de la bisagra. Es la opción más rápida y la propone el carpintero y youtuber David Gerard Fabro. Tendremos que desencajar la puerta, agarrar unos alicates y morder aquí y allá el espárrago. No es una solución definitiva, pero mantendrá alejado al fenómeno Poltergeist por una temporada.
¿Qué hacer cuando el sumidero traga lento?
Es un hecho: un ser humano normal pierde entre 50 y 100 cabellos al día. La mayor parte, mientras se lava la cabeza. Cuanto más largos, más probabilidades de que se enreden en el desagüe. "La mezcla entre esos cabellos y los restos grasos de jabón o cosméticos forman una pasta que ralentiza la evacuación del agua. Si eres un poco manitas, pilla un destornillador, extrae el desagüe y vacíalo con unas pinzas de depilar", explica Pía Nieto, autora del libro Manual para organizar tu casa (Arcopress). Es una operación algo repugnante, pero simple. Se puede repetir con el bote sinfónico, que es lo que se encuentra debajo de esa tapa, generalmente metálica, que hay en el suelo del baño, y a donde van a parar los desagües del lavabo, la ducha y el bidé.
¿Por qué 'desaparecen' las cosas que almacenamos en la parte baja de la cocina?
Las leyes elementales del movimiento (si empujamos algo hacia delante, se desplazará al frente; si no hay hueco, se desparramará hacia los laterales) y la de la gravedad (todo tiende a irse hacia abajo) también actúan dentro de los armarios. Más aún en esas zonas bajas de difícil acceso y que no se suelen colocar con demasiada frecuencia. Unos botes empujan a otros y, al final, algunos quedan confinados al fondo, donde nadie parece acordarse de su existencia. Salvo que tengas la elasticidad de un acróbata del Circo del Sol, es muy probable que des por perdido ese paquete de arroz que te trajo tu abuela del pueblo hace dos años.
"Se puede solucionar con cestas. Incluso instalando accesorios extraíbles 270º —como las bandejas que van atornilladas a las puertas abatibles— o con fuentes de plástico o rejilla giratorias que nos permitan acceder sin problemas a todo lo que tenemos almacenado", apunta Ignacio Morente, jefe de producto de Leroy Merlin. Vaciar los estantes con periodicidad para limpiar también ayuda.
¿Hay modo de que no se enreden los cables dentro del cajón?
Da igual que sean los de los cargadores, los de los auriculares (benditos inalámbricos) o los de los secadores/planchas/rizadores. Los cables tienen una demoníaca manía de enredarse. No estás solo ante tamaña fatalidad. Dorian M. Raymer y Douglas E. Smith, de la Universidad de Chicago, crearon un modelo matemático para explicarlo. Metieron en una caja cables de diferente longitud y los agitaron a intensidades diversas. Así hasta 3.415 veces. Cuanto más larga y mayor sea la turbulencia, más nudos. De hecho, la posibilidad de que un cable se enrede en el cajón llega al 100%, independientemente de lo bien que lo hayas enrollado antes de guardarlo. Para evitarlo, haz como los técnicos de cine y la fotografía: una vez que está bien enrollado, asegura el cable con una goma, cinta adhesiva o sujeciones de velcro.
¿Cómo consigo que la alfombra se quede en su sitio?
Qué difícil es mantener las alfombras en su sitio y mucho más si el suelo está encerado o es cerámico. Este desmán no solo es antiestético. Aumenta considerablemente las posibilidades de tropezar. "Existen bases antideslizantes adhesivas que impiden ese desplazamiento o que los extremos se volteen. Pueden ser en forma de malla continua o de tiras adhesivas", apunta Pía Nieto. Se basan en el principio físico del rozamiento: cuanto más rugosa sea una superficie, más dificultades habrá para que se deslice, por muy liso que sea el suelo sobre el que se apoya. Si funciona para los neumáticos, también solucionará lo de tus alfombras.
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