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Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Las lenguas que compartimos

El español y el portugués conviven en el mismo lugar con otras lenguas y este intercambio de culturas e identidades debe reflejarse en los sistemas educativos, y aún más en las escuelas

Amador Loureiro (Unsplash)
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Los países que conforman la comunidad iberoamericana de naciones disponen de un rico y diverso patrimonio cultural. En ellos conviven las culturas ibéricas, las culturas de los pueblos nativos y originarios, las culturas africanas y también las de pueblos que se han trasladado a estos países y allí se establecieron durante siglos, constituyendo así una diversidad altamente valiosa.

Esta riqueza se refleja sobre todo en el amplio espectro lingüístico existente en la región, en el que además del español y del portugués —lenguas mayoritarias— también se convive con varias lenguas originarias, algunas oficialmente reconocidas, otras no. Este es el símbolo de la rica historia, cultura y diversidad que componen esa región.

El español y el portugués conviven en el mismo lugar con otras lenguas y este intercambio de culturas e identidades debe reflejarse en los sistemas educativos, y aún más en las escuelas.

Esta situación resulta todavía más evidente cuando se trata de escuelas que están situadas en zonas fronterizas con países que hablan diferentes lenguas. El enfoque intercultural, bilingüe y multilingüe debe incorporarse con el fin de valorar las identidades, el arraigo y las diferencias lingüísticas, contribuyendo a fomentar la equidad de acceso y asegurar una mayor calidad en la educación para todos y todas.

El enfoque intercultural, bilingüe y multilingüe debe incorporarse con el fin de valorar las identidades, el arraigo y las diferencias lingüísticas

La interculturalidad implica la convivencia de diversas culturas en el mismo entorno, sin hegemonía de una sobre otra, requiere interacciones y diálogos respetuosos con iguales derechos de oportunidades y manifestaciones. ¡Esta es verdaderamente la inclusión educativa!

La interculturalidad supone negociaciones, intercambio de conocimiento y valorización del otro. Este enfoque en la educación necesita ser construido de manera diferente en cada situación, de acuerdo con los requisitos, necesidades e historia de cada comunidad, teniendo en cuenta la cultura local, los flujos migratorios, así como la realidad y los retos del siglo XXI en un mundo contemporáneo. ¡Este es el gran reto de la educación de nuestros países!

Por lo tanto, es necesario contar con políticas, programas, currículos escolares que reflejen esta realidad, cada vez más presente en la región. Conforme la educación se hace más accesible e inclusiva a todos y todas, se amplían los espacios democráticos y de la ciudadanía.

Además, los movimientos internacionales de educación para todos y el más reciente, la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, posicionan a la educación como motor central del desarrollo y al cumplimiento de los demás Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS), establecidos en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en septiembre de 2015, con el documento Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

La educación propuesta en esta nueva Agenda se contempla en el ODS número cuatro, que tiene como fin garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos. La visión humanista de la educación y del desarrollo constante en esta propuesta se basa también en los derechos humanos y la dignidad, la justicia social, la inclusión, la protección, la diversidad cultural, lingüística, étnica, la tolerancia, la realización humana y el desarrollo sostenible.

Conforme la educación se hace más accesible e inclusiva a todos y todas, se amplían los espacios democráticos y de la ciudadanía

Es importante también tener en cuenta las nuevas competencias y habilidades necesarias para el siglo XXI. Los futuros profesionales necesitan competencias que son esenciales para la vida, no solo competencias académicas y cognitivas que, aunque sean fundamentales, como las matemáticas y el lenguaje, no son las únicas que abrirán caminos a la vida.

Para afrontar los retos del siglo XXI en un mundo en continuo cambio, los jóvenes deben estar preparados para trabajar en grupos diferentes y aprender de ellos. Contar con competencias sociales e interculturales que contribuyan a que el joven se relacione eficazmente con los demás, de manera respetuosa con las diferencias culturales, colaborando con las personas de diversos orígenes sociales y étnicos, estar abierto a ideas y valores distintos, utilizando las diferencias sociales y culturales para generar nuevas ideas e innovar. Estar abierto a las relaciones en las redes de comunicaciones con personas que piensan y se manifiestan en el mundo de manera diferente.

El próximo año 2019 se celebra el Año Internacional de las Lenguas Indígenas y esta ocasión será una oportunidad para promover la afirmación de derechos, la valoración y la preservación de este rico patrimonio cultural y lingüístico que tenemos, sobre todo, en la región iberoamericana.

La propuesta para llevar a cabo proyectos de escuelas interculturales bilingües en zonas de fronteras de los países de la comunidad iberoamericana, presentada este mes de noviembre en Brasilia por la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), es una importante oportunidad de contribuir de forma innovadora a crear metodologías, currículos y estrategias didácticas. Asimismo, permitirá desarrollar competencias lingüísticas, al aprender otro idioma, poder sobre todo, prepararse para vivir en un mundo cada vez más en transición, abierto a la diversidad y la convivencia respetuosa entre las diferentes culturas, teniendo el diálogo intercultural como mediador en la construcción de un futuro de naciones hermanas que habitan un mismo planeta.

Ivana de Siqueira, asesora del Programa Iberoamericano de Difusión de la Lengua Portuguesa de la OEI.

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