Existe una regla de oro: cuanto más próxima sea la fecha de salida, más difícil resultará encontrar un viaje barato. Pero ¿de cuánta antelación estamos hablando? "Si quiere planificar bien un viaje, y ahorrarse algo, sobre todo en vuelos cortos dentro de Europa, debe hacerlo con seis meses de antelación", decreta Javier Blanquer. "Los vuelos empiezan a subir de precio cuando queda menos de un mes para el despegue", confirma Albert Serratacó. Intente ser flexible con la fecha: "Hemos visto que un vuelo sale el martes por 500 euros y el miércoles por 200. Si eres flexible puedes encontrar verdaderas gangas", añade Tamara Seoane.
Tenga en cuenta, además, que lo más caro es viajar en fin de semana. "Para hacer una escapada de fin de semana, nos hemos dado cuenta de que suele salir más barato despegar el sábado a primera hora que el viernes. Para volver, los domingos son el día más caro, así que merece la pena esperar al lunes si es posible. Muchas veces, el vuelo más económico sale a primera hora de la mañana del lunes y tienes la opción de volver al trabajo ese mismo día", explica Albert Serratacó. Y si elude viajar en fin de semana, mejor que mejor. Se dice que los mejores días para viajar son los martes o los miércoles. Desde nuestra experiencia, una opción bastante económica es volar de jueves a martes", revela Regina Fernández Llata.