Koolhaas lo apuesta todo al techo
El pabellón Naomi Milgrom que OMA levantará en Melbourne concentra sus recursos en una cubierta forrada de aluminio que refleja la ciudad
Un techo en el paisaje. Una cubierta flotante. Un prisma de dos metros de altura que parece flotar sobre la vegetación. Un volumen panelado en aluminio diseñado para ser devorado por el entorno de los jardines Queen Victoria de Melbourne. También para reflejar los rascacielos de la ciudad. Una arquitectura intrigante y sin embargo sencilla que ambiciona desaparecer. Todo eso quiere ser el pabellón ideado por OMA que la la Fundación Naomi Milgrom construirá en Melbourne el próximo mes de Octubre (podrá visitarse hasta Febrero de 2018).
El pabellón visible, la cubierta plateada, corona un anfiteatro que parece excavado en el parque. Por eso en lugar de muros laterales, dos montículos forrados con vegetación local ocultan las gradas que cierran lateralmente el edificio. Una de esas dos tribunas, la menor, es móvil y puede, con ese movimiento, transformar el espacio interior en exterior abriendo sus puertas al público que queda fuera.
Más allá de pesar sobre el paisaje, o flotar sobre él, la cubierta ideada por Koolhaas y su equipo concentra buena parte de las instalaciones del pabellón temporal: desde la iluminación hasta los telones y cortinajes que quedan recogidos en ese prisma. Así, en este pabellón de Koolhaas nada es lo que parece: el paisaje se convierte en arquitectura -el terreno excavado de las fachadas laterales- y la propia arquitectura –reducida a la cubierta- quiere ser paisaje camuflada por el reflejo del entorno vegetal de los jardines.
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